El día de hoy te traemos la oración de San Agustín para en esos momentos en los que más lo necesitas. Muchas veces las personas estamos presas de nuestros problemas y necesitamos de esa fuerza que nos impulse a continuar nuestro día a día, para ello hemos escogido una serie de oraciones que te ayudarán.
Oración de San Agustín: No llores si me amas
San Agustín de Hipona, santo por excelencia escribe este poema con la intención de dar consuelo a quien lo necesita. Y asimismo, demostrar que la muerte no es el final, sino un cambio de perspectiva, algo que no es materializable pero que es absolutamente majestuoso.
En este poema de San Agustín titulado «No llores si me amas» hay una maravillosa descripción de su percepción de cielo. Declara que, está lleno de cantos, gozo y felicidad desde el punto de vista en el que se le vea. Hay un aire de paraíso y allí todo es paz y amor para brindar. Ahí nos despojamos del pecado y de las malas intenciones de los humanos, es un lugar para ser feliz y acompañar a Dios bajo todos los esquemas permitidos.
Todos hemos perdido a seres queridos por distintas razones, por lo que hoy te traemos este pensamiento sobre la muerte y la transfiguración de la misma. Recordando que, morir no es desaparecer, sino cambiar de rumbo.
Oración de San Agustín Sobre la Muerte
Este poema es uno de los más conocidos de San Agustín de Hipona, en él nos habla de la muerte y sobre cómo el cuerpo transfigura al llegar al cielo. Del mismo modo, da palabras de aliento al lector sobre temáticas como perder a un ser querido, recordándonos que en compañía de Dios estaremos mejor.
Esta oración de San Agustín por los difuntos explica de la forma más humana el sentimiento de superación y las razones por las cuales es importante ver a la muerte con ojos de deseo, pues es ese el lugar en el que el cuerpo podrá alcanzar la liberación del pecado y la maldad de un mundo corrompido por los deseos de la codicia y crueldad.
Además, invita a no temer a la muerte. Las personas tienen la creencia de que la muerte es el final, cuando en realidad, la muerte no tiene trascendencia sino que solo significa un nuevo comienzo al lado del creador, nuestro padre eterno.
Oración de San Agustín: Cuando tenga que dejarte
En esta oración de San Agustín a la muerte quiere aconsejar al doctor a superar el duelo de perder a un ser querido. Es muy común que en algunos casos las personas no superen la muerte de algún familiar o ser amado, pero en esta oración de San Agustín explica lo importante que es dejar ir las penurias en el momento adecuado. Una forma para ayudarte a superar tu dolor es leer pasajes bíblicos sobre la muerte.
Los que se fueron, pese a la frialdad de su ausencia: están, pero no en un nivel que los ciudadanos de el mundo terrenal puedan visualizar. Es por esto que suele suceder que no logramos dejar ir aquellas penas que arrastramos, cuestión que San Agustín desea solucionar con el mayor anhelo posible.
El paraíso es maravilloso. Es por esto que en esta oración de San Agustín para los fieles difuntos se explica que no debemos temer a lo que nos depara, pues Dios es sabio y sabe las razones por las cuales actúa. Todo tiene una explicación más grande que nuestra existencia misma, algo que no es palpable ni cuantificable, que no está sujeto a las banalidades humanas.
A continuación, se muestra una oración para quienes tenemos algún ser amado pasando por momentos difíciles. Esto, con ayuda de Dios y San Agustín podrá aliviar su dolor y encaminarlos en el camino de la superación.
¡Oh Dios, oh San Agustín!
La angustia mantiene preso(a)
a (inserte nombre)
Ayúdenme a ayudarle.
Enséñenle el camino.
Depositen alivio en su sonrisa,
háganle sentir bien.
Que deje las penas y que deje ir
el dolor, la soledad y la desesperanza.
Enséñale el camino,
hazle entender
y libérale de ese dolor que le ocupa.
Tú, Dios, que enviaste a tu hijo
a morir por nosotros,
concede mi deseo.
Tú, amado San Agustín.
que viviste en carne propia
sobre la muerte, concede mi petición.
Solo con ustedes (inserte nombre)
podrá acabar con su dolor.
Amén.
Si estás pasando mediante un proceso de duelo te aconsejo que veas este vídeo para superar ciclos de pérdida. Sin embargo, es importante que recuerdes que debes dejar todo en manos de Dios y encomendarte en su totalidad a su voluntad, solo él es quien sabe qué nos deparará.
https://www.youtube.com/watch?v=PeNFwuUeYXI&t=11s
Oración de San Agustín por los hijos
Esta oración es de San Agustín a su madre, llamada Santa Mónica, quien es patrona de la maternidad y ejemplo de buena voluntad, piedad y esperanza incluso en las adversidades. Esta oración debe acompañarse con un «Padre Nuestro» y tres «Avemaría»
Para aquellos padres y madres que se preocupan por el bienestar de sus hijos se les invita cordialmente a realizar esta oración durante una semana para atraer la buena fortuna y protección de los más pequeños de la casa.
¡Oh, Santa Mónica!
Tú que fuiste madre,
debes entender más que nadie
mi deseo de ver a mis hijos felices.
Es por esto que hoy, Santa María,
ruego porque intercedas en sus vidas.
Llénales de gozo, felicidad y bendiciones
Protégelos del mal, pues el mundo
está plagado de malos deseos.
Ayúdales en sus estudios,
en sus vidas,
en sus futuras familias.
Pero sobre todo, ámalos.
Porque para mí,
ellos lo son todo.
Amén.
Oración de San Agustín por la serenidad
Como seres humanos es fácil abrumarse contra la adversidad. Nadie quiere fallar, pero a veces, por nuestro miedo al fracaso perdemos la paz interior.
Esta oración para atraer la serenidad invita a las personas a poner las cartas en manos de Dios, pues solo él tiene el control de las cosas y sabe lo que es realmente bueno para nosotros. Todo sucede bajo su tutela, y solo con la compresión y plática con el señor se puede tener la certeza del porqué de las cosas.
Muchas veces olvidamos que todo tiene un orden natural, y que del mismo modo, lo que sucede es voluntad de Dios. Para quienes han perdido el rumbo y claman por serenidad se encuentra esta oración de San Agustín de Hipona:
¡Oh, San Agustín,
libérame de todo esto,
he perdido mi calma,
mi conexión con el mundo.
Ayúdame a no abrumarme
ante la adversidad.
Ayúdame a ser más paciente,
porque ahora ese es mi
mayor debilidad.
Protégeme del falso amigo,
del estrés, de la paranoia,
ayúdame a recobrar esa
serenidad que siento al
hablar contigo.
Hazme darle un significado a
mi vida.
Devuélveme la paz, la serenidad
y el amor propio.
Amén.
Si sientes que has perdido la paz, ve este vídeo, en él se dan una serie de consejos para recuperar la paz interior por medio de Dios y la palabra. Es muy efectivo, pero recuerda estar dispuesto a entregarte a el Espíritu Santo y su sabia palabra.
Dios siempre ha sido la mejor terapia de todas, solo déjalo entrar en tu mente. Habla con él, explícale tus problemas y sana tu corazón con ayuda del ser más piadoso y bueno de todos.
https://www.youtube.com/watch?v=ZyTmcLRZwlo&t=12s
Oración de San Agustín por los difuntos
Durante toda la trayectoria de San Agustín hay una gran presencia sobre el debate relacionado a «la vida después de la muerte». En él, se explican las razones por las cuales no debe contarse a la muerte como un final definitivo, sino como una nueva forma de vivir la vida plenamente, alejados de los problemas y envidias del mundo terrenal.
En esta oración de San Agustín por la muerte se busca dar consuelo a aquellos que han perdido a un ser amado por distintas razones, alegándose que lejos de ser el fin, es un nuevo comienzo cargado de bendiciones. Opina que, las personas no deben recordar a sus muertos con tristeza, sino con toda la alegría y orgullo del mundo. En esta oración de San Agustín de «la muerte no es nada»
Nuestros seres amados yacen en el paraíso, al lado de un Dios bueno y lleno de gracia. Ya no hay dolor, ni problemas, solo gozo. Es por esto que San Agustín quiere hacer reflexionar al lector sobre la forma en la que concibe la muerte. En esta oración de San Agustín «la muerte no es nada» se quiere cambiar el paradigma de visualizar la muerte como el fin de la vida y que se comience a considerar por lo que realmente es: la liberación de una vida llena de penurias.
El siguiente rezo es por el deseo de bienestar de las almas de nuestros seres queridos. Debe hacerse diariamente durante una semana. Para ello, debe encomendarse a San Agustín, prender una vela, y rezar con la mayor fe posible. Recomendamos acompañar esta oración con un «Padre Nuestro» tres «Avemaría» y dos «Gloria a Dios.
¡Oh, querido Dios,
protege a (inserte nombre)
guíalo en su camino al paraíso.
Perdona sus pecados,
y cuida su alma.
Déjale gozar de tu compañía
allá arriba en los cielos,
deja que bese tus pies,
que beba del dulce néctar
contigo, hoy,
aquí, te pido por él(ella)
porque me preocupo,
porque le amo y deseo
que esté bien
incluso después de la muerte.
Amén.
A continuación, se deja en formato de vídeo un poema escrito por San Agustín de Hipona referido a la muerte. Se explica de manera muy profunda la forma en la que debería ser vista la muerte ante los ojos de un hijo de Dios. De pronto ya no hay dolor ni pena, sino que te encuentras de lado de el creador del cielo y universo, el padre de todas las especies y razón del amor en el mundo.
Oración de San Agustín: Tarde te amé
Los seres humanos siempre aspiramos a la felicidad. Parece tan distante, tan ajena y tan improbable que la buscamos en cualquier sitio menos en el que se encuentra. ¿Quién diría que esa felicidad que tanto se anhela se encuentra en la parte más interna de tu ser y que para encontrarla solo debes hablar con Dios?
«Tarde te amé» es un fragmento de el libro «Confesiones» de San Agustín de Hipona, en este escrito quiere invitar al lector bajo su propia experiencia a entender la felicidad. En él se explica la búsqueda de lo inalcanzable y sobre cómo indagamos en los lugares más vacíos.
La sorpresa de San Agustín llega al notar que todo aquello que había estado buscando en placeres banales se encontró siempre dentro de sí. Todo este tiempo ese vacío pudo haberse llenado con la interiorización y la fe misma.
«Tarde te amé» no solo es un escrito más, sino que invita al lector a hacer una reflexión de vida y las promesas de Dios para sus hijos. De pronto, las cosas importantes comienzan a tener mayor sentido, y ese «algo» que buscamos está más cercano de lo que creemos. Solo se necesita de fe y ganas de entablar una conversación con Dios.
A continuación, se presenta una oración a San Agustín por el tiempo y saber aprovecharlo. Como humanos, solemos buscar cosas en los lugares equivocados. Esta oración pide a Dios y a San Agustín a enseñarnos a valorar lo que tenemos.
Ayúdenme a valorar las cosas
antes de perderlas.
Ayúdenme a aprovechar
el tiempo, pues rápido se va.
No quiero entregarme a tu fe demasiado
tarde. Quiero vivirte con intensidad,
mi Dios amado.
No me dejes que pierda el
tiempo en lo que no vale.
Como el dinero, la avaricia,
y las cosas que no me servirán
para poder adorarte.
Ayúdenme, querido Dios,
querido San Agustín,
a seguir su palabra,
a expandir el bien
el amor a la familia
y todo aquellos que nos
hace tus hijos.
Ayúdenme a obrar como
un digno hijo de Dios, pues
quiero amarles, toda mi vida.
Amén.
El siguiente vídeo es una adaptación musical de este poema de San Agustín, vale la pena verlo y disfrutarlo. Da una sensación de paz y esperanza a la vez. Si necesitas pasar un rato diferente o conseguir ese «Algo» que te llene es recomendable empezar a orar y disfrutar el ser cristiano con la mayor intensidad.
Oración de San Agustín al espíritu Santo
El humano está condicionado a pecar, tristemente es su naturaleza. Esta oración de San Agustín a Jesús nace del deseo de querer ser mejores. En muchas ocasiones las personas podemos cometer errores, y es por eso que justamente se debe orar y pedir perdón al Espíritu Santo. Solo él podrá guiarnos al camino del bien, en donde el amor, el cariño y las buenas voluntades perfuman el ambiente.
A veces necesitamos un empujón para atraer lo bueno y puro. Por ello hoy traemos esta oración para San Agustín que servirá para pedir esas fuerzas, esa inspiración y la buena vibra necesaria para actuar de manera digna de Dios.
Espíritu Santo, guíanos
ayúdanos a tener siquiera una pizca
de la bondad que te llena. Tú, que moriste en la cruz
por completos extraños. Guíame,
para dejar de ser tan pecador
y comenzar a ser como tú.
Quiero seguir tu palabra, inspírame a
ayudar, amar, cuidar como tú
lo haces diariamente. Dame el bien
aunque en mi naturaleza esté ser
un pecador.
Amén.
- Un escrito especialmente conocido de este personaje es la oración de San Agustín por las almas del purgatorio, en donde se pide por aquellas almas en desgracia que no han podido acceder a los cielos en compañía del señor. Se implora por su descanso eterno y para que Dios les conceda el perdón si lo merecen.
Hay muchas almas arrepentidas de sus pecados, que vagan sin un lugar al cual llegar, es por ellos que se le pide al señor que les conceda el perdón si está en sus planes hacerlo.
Querido Dios, guía a esas almas sin rumbo.
Concédeles el perdón, dales
un puesto a tu lado en los cielos.
Tú que eres piadoso, gentil
y lleno de buenas voluntades.
Ayúdales a conseguir tu perdón,
a arrepentirse, a amarte
como lo mereces. Sácalos del
camino del mal, perdona sus
errores, su faltas, y todos sus pecados.
Dales la oportunidad de
vivir al máximo en la
espectacularidad de tus cielos,
junto con todos tus ángeles,
tus colegas, tu hijo.
Errar es de humanos, así que
por favor, perdona al que se
arrepienta, al que te ame
y al que prometa seguir tus
pasos, tu palabra y buenas acciones.
Por esos que no tienen hogar, por
los bebés no bautizados,
te pido por ellos, por su bienestar,
por que puedan estar contigo.
Amén.
- Oración de San Agustín para peticiones especiales:
Esta debe realizarse de modo que al terminar de recitar la oración debe encomendarse a San Agustín, rezar un «Padre Nuestro», tres «Avemaría» y tres «Gloria a Dios.» Esta petición está especialmente hecha para pedir por ayudas específicas, bien sea problemas económicos, en el amor o en la salud.
«¡Oh, Salvador mío,
necesito tu ayuda.
Ayúdame a ser más
que mis problemas.
De pronto, nada sale
como se espera, ayúdame
soportar tus pruebas.
A saber qué es lo mejor
para mí.
A pensar antes de actuar.
A poder enmendar mis errores
y seguir adelante.
Necesito de tu apoyo, porque soy
débil y me encuentro
devoto a ti en todos los
aspectos posibles.
Amén.»
- San Agustín Rosselli fue otro santo a quien debe rendírsele el culto que se merece. Para aquellos creyentes que siguen su palabra se encuentra esta oración, se recomienda acompañarla de un «Padre nuestro» y tres «Avemaría» para una mayor eficiencia.
«Señor Dios todopoderoso, que entre los
humanos has escogido a San Agustín Roscelli
para ser uno de tus enviados en la tierra.
Concédeme esa pasión, ese júbilo y ese deseo
de ser mejor. Soy pecador por naturaleza, así
que dame las fuerzas para resistir al pecado,
es mucho lo que he hecho, pero sé que
con tu amor y cariño podré ser
un buen hijo de Dios, Padre Todopoderoso.
- Primera oración de San Agustín:
Oh, San Agustín,
dame la fuerza que tú tuviste
soy hombre de mentalidad débil.
Estoy pasando por mucho,
me entrego completamente a
los planes que Dios tenga para mí.
Él, que es tan misericordioso
y que sabe tanto del porqué hace las cosas.
Él, que es tan glorioso y
lleno de amor,
que todo lo puede, que su
alma goza de la mayor pureza
es el único que puede ayudarme
a (Diga con la mayor de las fe lo que desea)
no te pido mucho, solo un poco
de ayuda. Dame un poco de
tu misericordia y permíteme
ser mejor.
Amén.
- Segunda oración de San Agustín:
Amado San Agustín,
tú que fuiste pecador
y sabes lo débiles que somos
los humanos.
Concédeme la ayuda para ser mejor
así como tú cambiaste
permíteme hacerlo
dame esa inspiración
ese poder y esas ganas
de cambiar y ser más que
un pecador más,
ayúdame a ayudar,
a sonreír, dejar los vicios,
el pecado y todo aquello
que me aleje de acompañar
al señor Dios en sus gloriosos
cielos celestiales.
Dios hace cosas maravillosas diariamente. Muchas de esas no las notamos. Creemos que Dios nos envía castigos, cuando en realidad, envía pruebas de fe. En la actualidad, más que nunca, se necesita un poco de devoción y confianza en Dios. Es importante notar cuán importante es esto, pues solo siguiendo los pasos de Jesucristo, nuestro señor, el mundo podrá dar ese cambio que tanto necesita. Solo así nuestras calles se llenarán de risas, de gozo y de amor al prójimo.
En el siguiente vídeo se deja adjuntos el inicio de una oración a San Agustín para pedir su intersección en los momentos más difíciles. Él traerá su ayuda y junto con nuestra fe podremos superar nuestros problemas. Con esta oración la paz y la tranquilidad llenarán nuestra vida y se podrá vivir aquellos días de gloria con los que tanto soñamos. Solo se necesita un poco de fe y voluntad de Dios.
