La Virgen Santa Elena es una de las mujeres más veneradas y adoradas en la religión católica, siendo ella la que trajo objetos propio bañados en la esencia de Jesús. En el siguiente artículo encontrará parte de su historia y oraciones a la Virgen Santa Elena.
Historia de la Virgen Santa Elena
Santa Elena
Conocida entre el Santoral Católico por haber conseguido y traído los objetos en los que sufrió Jesucristo como la cruz y los clavos. Reconocida por los católicos que le proclaman su santidad, se encargó en cuerpo y alma en buscar las reliquias de Jesús y los restos de los tres reyes Magos.
En la religión, es considerada como patrona del matrimonio, de la arqueología y de la conversión.
Fue una emperatriz romana que luego fue proclamada como Santa por la iglesia. Santa que pone nombre a muchas de las ciudades en la ue es Patrona, como es el caso del sitio en donde fue descubierta la cruz, como lo es en Chile donde existe una viña con su nombre, como lo es en Argentina que tiene una ciudad que también lleva su nombre, así como estos dos países son muchos los que tienen a Santa Elena venerada por su patronazgo.
Origen de la Virgen Santa Elena
Virgen Santa Elena
Nace en trapani Roma aproximadamente en el año 250, lugar que se convertiría en Helenópolis gracias a su hijo Constantino I que la proclama con el nombre de su madre.
Aunque para los años en los que se desenvolvió y creó su vida no era permitido que los sirvientes se casaran con los superiores, el de la Virgen Santa Elena no fue el caso, sus padres eran sirvientes de la realeza y aun así ella pudo casarse con Constancio Cloro.
Santa Helena o Helena de Constantinopla, tiene una vida llena de riquezas y lujos, no obstante es una mujer que siente una rotunda curiosidad para descubrir la verdadera historia de Jesús.
Es por ello que se encarg de hacer la búsqueda de los artefactos que hicieron vida e historia a Jesucristo Nuestro Señor.
En el año 292 aproximadamente se separa definitivamente de Constancio Cloro, hombre con el que tuvo a su hijo Constantino I, quien unos años más tarde se convirtió en el emperador del Imperio Romano. Fue entonces una mujer de renombre entre las personas que conformaron la corte imperial.
Vivió los años más sanguinarios y violentos de Roma, por ello se convirtió en una mujer muy buena y benevolente que ayudaba a las personas, es debido a esto que la iglesia la proclamó próximamente como Santa. Comienza pues un largo peregrinaje por tierras Santas en búsqueda de la cruz y de los objetos pertenecientes a Jesús, se convierte en Cristiana y su convicción le ayudó a encontrar todo lo que se propuso.
Una vez encontrada la cruz esparció su búsqueda por Jerusalén, Roma y la misma Constantinopla. La fecha de su muerte se remonta al año 330 en Roma.
Recomendaciones para orar
Recomendaciones para orar
Antes de realizar la oración a Santa Elena. es importante que conozca estas recomendaciones que le harán hacerla más efectiva:
- Encuentre un sitio en el que pueda escuchar el silencio.
- Realice la oración de corazón y con fe absoluta porque está siendo escuchado.
- Recuerde hacer peticiones con el corazón bondadoso y no egoísta.
- Recuerde también que el poder de la oración es inmenso y que los deseos que usted haga sean para su bienestar y el de terceros.
- Dispóngase a hacer la oración en paz.
- Establezca una conexión sincera con Dios.
Oracion a la Virgen Santa Elena de la cruz
Oración a la Virgen Santa Elena
Al magnífico Señor de todos los cielos Dios, aquí y ahora quiero pedirte con todas mis fuerzas y confianza que envíes a la tierra y a tus hijos al Espíritu Santo. Que nos acompañe a través de toda tu voluntad divina, nos brinde amor y nos brinde protección, te suplico que sea él mi guía, mi voluntad y mi espiritualidad.
A ti te ruego Padre que yo estoy seguro que siempre esperas todo lo extraordinario de mi vida para mi y los míos, que lo deseo con todas mis fuerzas experimentar a través de tus bendiciones, te pido por favor escuches mis oraciones. Amén.
Bendita y gloriosa Virgen Santa Elena, a tus brazos vengo querida madre. Tú mujer dichosa que viniste a abrir los corazones y espíritus de las personas, tú que abriste tu corazón para hacer la búsqueda da la cruz.
A ti madre poderosa, vengo a pedirte que nos rompas las ataduras que nos hacen fieles al pecado, devuélvenos a los brazos de Nuestro eterno padre Dios. Tú que pudiste hallar el tesoro más grande, tú que pudiste hacer una conversión sincera del corazón.
Te pido hagas que nosotros también hallemos ese tesoro, haz que hallemos a Jesús que reina en todos nuestros corazones como ser divino que es, Cristo vive en nosotros, te pongo hoy mis manos en las tuyas para que con tu voluntad me hagas ser un ser mejor y lleno de divinidad, que con tu voluntad puedas hacer que todas mis peticiones sean verídicas. Amén.
Oración a Santa Elena para el amor:
