Muchas religiones del mundo tienen un libro sagrado, un libro en donde se encuentran todos los estatutos que rigen el comportamiento de quienes practican tal religión. Hoy vamos a hablare un poco sobre el Islam y el Corán, el libro sagrado de los musulmanes. (Ver también: El Islam y la Muerte)
¿Qué es el Islam y el Corán?
La religión es parte fundamental en la vida de muchas personas alrededor del mundo, si bien hay que reconocer que hoy día la religión se encuentra en estado de apatía, es decir, cada vez son más las personas que no creen en un Dios, o dioses.
A pesar de ello, religiones como la islámica y la cristiana son las más han perdurado en el tiempo, y me refiero a que ha llegado a un gran numero de personas a lo largo de los años. Aunque debemos considerar que ambas religiones usaron la fuerza en su momento, para expandirse por el mundo.
Antes del cristianismo y el islam, había una que dominaba sobre todo en Persia, la religión de Zoroastro, dicha religión durante siglos fue la más practicada en parte de África y Asia, al menos hasta que apareció el cristianismo y éste comenzó a ganar terreno junto al imperio romano.
Por otro lado, un tiempo después nace la religión islámica y amenaza aun más a la religión de Zoroastro, ya para los años 600, cuando el imperio pesar cae debido a las hordas de musulmanes, lo que quedaba de la religión de Zoroastro terminó desapareciendo, aunque hoy día aún existen pequeños grupos de personas en el mundo que la practican.
Ahora, la pregunta del millón ¿Qué es el Islam? Podríamos definir el islam como una religión monoteísta, recordemos que en este tipo de religiones sólo se ve a un solo Dios, es decir, los seguidores de las religiones monoteístas sólo creen en la existencia de un Dios.
Muy diferente a las religiones politeístas, recordemos que en ella suele haber una diversidad de dioses, es decir, sus seguidores creen en la existencia de múltiples dioses. Un ejemplo muy claro para representar el politeísmo, es la mitología griega, ellos creían en múltiples dioses: Athenas, Zeus, Hades, Poseidón, entre otros.
Entonces, ya sabemos que el islam es una religión monoteísta cuyo único Dios es Alá, que significa Dios. En el islam, Mahoma fue el último profeta de Dios, el último mensajero de Dios en la tierra, al cual Dios le revelaría todas las cosas.
Cuando Mahoma sintió el llamado de Dios, respondió al mismo e inició su misión de ir y predicar la palabra de Dios por toda aquella región, en aquél entonces, la península ibérica, en donde en un comienzo fue abucheado y tomado por tonto.
Lo que no sabían que Mahoma se había hecho ya con fieles seguidores que estaban dispuestos a dar la vida por la fe en la creían, es así como se inician diferentes enfrentamientos bélicos en donde Mahoma buscaba vencer y establecer el islam como una religión oficial.
Es importante mencionar que, en aquella época, y hablamos del siglo VII, las tribus árabes estaban totalmente divididas en tribus nómadas, es decir, tribus que se movían de región constantemente, y las tribus sedentarias, que eran aquellas tribus que permanecían siglos en un mismo sitio.
Entre las tribus había gran rivalidad por cuestiones de tierras, recursos y simplemente peleas tontas, el caso es que en ese escenario entró Mahoma en acción, unificando a las tribus tanto nómadas como sedentarias en un sólido y letal ejército militar.
Con ese ejército, la religión monoteísta islámica se hizo con grandes territorios de Asia menor y el norte de África. Sin embargo, lo que marcó el final de nueve siglos de expansión territorial, cultural y religioso, es que a pesar de que las tribus estaban unidas por un único líder, ellas no dejaron a un lado sus diferencias tribales y estaban en constante guerra.
Esas diferencias tribales y esa desunión que tenían de forma interna ocasionó que siglos más tardes, los cristianos tomaran control de varias de sus ciudades principales, costó que perdieran muchas batallas, a pesar de haber ganado muchas otras en el pasado.
Los cristianos usan la biblia como fuente de conocimiento divino, ellos afirman que la misma fue escrita por diferentes personas en diferentes épocas, por ejemplo, el antiguo testamento lo venían escribiendo distintos profetas del antiguo mundo.
Los cristianos afirman que Biblia es la palabra de Dios revelada al hombre y que por medio de ella el hombre puede alcanzar un estado de santidad digna del padre celestial. Allí están las instrucciones para alcanzar la salvación y por consiguiente, la vida eterna.
Lo mismo pasa con el Corán, el corán viene siendo la biblia de los musulmanes, de la religión islámica. Ellos afirman que el mismo fue escrito por Mahoma, a quien el arcángel Gabriel le hablaba de forma oral, a veces le escribía en hojas, en trozos de cuero o huesos.
Los musulmanes creen que el corán es el libro definitivo de Dios, es el libro santo, sagrado de la religión islámica. También consideran que Mahoma fue el último profeta de Alá en la tierra, recordemos que, Mahoma murió en el año 632, y sus seguidores comenzaron a reunir los escritos de Mahoma.
Durante el gobierno del califa Utmán, sucedieron estas recolecciones de los escritos y los organizaron, dando origen al libro que hoy día conocemos que cuando con 114 capítulos, cada uno dividido a su vez, en versículos. Por otro lado, el Corán tiene cierto parecido a la biblia, al menos en cuanto a sus historias.
En la biblia hay personajes destacados y clave como Moisés, Abraham, Noé, Jonas, Jesucristo, Adán, Juan el bautista, entre otros, dichos personajes también aparecen en el Corán, pero lo hacen como profetas, y sí, la mayoría de ellos eran profetas, al menos según la biblia, pero el Corán incluye a Jesucristo como un profeta también.
Entonces, tomando todo ello en cuenta, vemos que hay cierta similitud entre el corán de los islámicos y la biblia de los creyentes cristianos. Aunque los cristianos no aceptan el islam, y el islam tampoco acepta al cristianismo, hay cierta similitud entre ambas, comenzando con que ambas religiones basan su fe en el mismo Dios y Creador.
Claro está que el dios islámico se llama Alá mientras que el Dios cristianos se llama Jehová, pero en términos generales hablan del mismo Dios y creen en el mismo Dios, sin embargo, las doctrinas que ambas religiones enseñan están muy lejos de parecerse.
Tanto el cristianismo como el Islam discrepan en muchas cosas, algunos cree que Jesús es Dios, mientras que los islámicos refutan esa teoría, porque consideran que Jesús fue un profeta de Dios y uno de los mejores, más no que era Dios. (Ver también: Islam en la Edad Media)
El Corán y el futuro del islam
Las religiones actualmente están pasando por una etapa difícil, se debaten entre las variantes que cambian en el tiempo en el mundo entero. Por tales razones, existe la posibilidad de que en el futuro las religiones mueran, es decir, estadísticamente hablando, las religiones cristianas e islámica han perdido gran cantidad de seguidores a lo largo de toda Europa.
Por otra parte, si hablamos de la religión islámica, hoy día la misma está quedando con una religión de salvajes y personas que no aman la vida, y estamos hablando de grupos extremistas considerados terroristas por los desastres que han causado en el mundo entero, un ejemplo muy claro de ello ISIS.
Sin embargo, hay que hacer la mención de que no todas las personas que practican el islam llegan a tales extremos, estoy seguro de que si alguien que lee esto conoce a una persona que practica el islam, y esa persona lo hace como debe ser, no la meterá en el mismo paquete junto a los grupos extremistas.
Si nos vamos a la parte del cristianismo, en los últimos años han surgido una oleada de denuncias con respecto al abuso sexual de menores por parte de los sacerdotes, obispos y demás, son situaciones difíciles que ambas religiones deben afrontar para no experimentar la pronta extinción.
Nasr Hamid Abu Zayd, fue un escritor egipcio que nació en el año 1943 y falleció en el año 2010, dos años más tarde de su publicación: El Corán y el futuro del islam. En ella aborda temas muy puntuales que hacen referencia a la historia del islam y en cómo el Corán influye en la vida de las personas.
También aborda temas con respecto a los cambios que sufren las sociedades a medida en que pasa el tiempo y en cómo las religiones deben adaptándose a ese cambio sin dejar a un lado sus raíces, es decir, sus principios, sus enseñanzas.
Es un escrito que no busca antagonizar a la religión islámica, tampoco la defiende de lo indefendible, pero sí busca que el lector vea y entienda lo que es el islam en sí, y no lo que venden las noticias y los grupos extremistas terroristas. (Ver también: Estado Islámico)