Santa Brígida de Irlanda, todos los detalles de esta legendaria santa, milagrosa para curar diversas enfermedades, en especial las de la vista, fundadora de uno de los primeros monasterios mixtos de Europa, patrona de Irlanda junto a San Patricio.
Santa Brígida de Irlanda: historia
Santa Brígida de Irlanda, nace en la localidad de Leinster, en Kildare, una región cercana a la capital irlandesa, Dublín, alrededor del año 451, fue hija, ilegítima, del rey Duptaco, un rey adorador de los dioses falsos celtas, su madre fue una esclava al servicio de la corte del rey. Su nombre Brígida hace alusión a una diosa celta, Brighid, cuyos poderes mágicos eran el de hacer curaciones milagrosas, adivinar, y poseer las llamas del fuego sagrado.
Santa Brígida de Irlanda, es una santa, muy venerada en el territorio irlandés, y es su tradición es mayormente difundida en Europa, y a donde lleguen los irlandeses devotos del catolicismo, sin embargo, pertenece más a la leyenda que a la veracidad histórica, debido a que son varios los relatos que sobre ella se han escritos, situando el transcurrir de su vida de diferentes formas, aunque son varios los relatos que concuerdan que era hija de un rey y de una esclava.
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También es probable que su historia sea una sincretización de la deidad pagana celta Brighid, práctica que buscaba eliminar los cultos paganos sustituyendo esas deidades por santos o santas, con características similares pero convergiendo en la doctrina cristiana. Aunque también se le atribuye, a Santa Brígida de Irlanda, el ser la sucesora de la obra predicadora de San Patricio de Irlanda, con quien comparte el patronazgo de esa nación.
Los relatos legendarios irlandeses, como los poemas de San Donato Obispo, 829-876, que versificaron su vida, son numerosos, por eso su culto, aunque su historicidad no sea del todo verificada, es de profundo arraimbre irlandés, y se ha extendido a toda Europa, a pesar que el culto a Santa Brígida de Suecia, 1303-1373, una santa de nombre similar, tienda a confundir a algunas personas.
Las historias de Santa Brígida de Irlanda cuentan que era una monja muy piadosa que, cuando era pequeña regalaba a los pobres la mantequilla que le encomendaban comprar. Cuando era abadesa no cesaba de atender a los enfermos incluso a los leprosos, era una abadesa del Monasterio de Kildare a la que nunca le falto un poco de leche u otros productos lácteos con que saciar el hambre de los pobres.
Santa Brígida de Irlanda fallece en el año 525, en el Monasterio de Kildare, donde permanecen sus restos hasta que son llevados a la Catedral de Downpatrick, en Irlanda del Norte, junto a los de San Patricio, patrono de Irlanda. En los tiempos del rey Enrique VIII, por este instaurar la reforma anglicana, es decir la ruptura con el catolicismo, las reliquias de Santa Brígida fueron profanadas y dispersadas.
La canonización le fue realizada en 1977, por el Papa Paulo VI, 1963 a 1978, su festividad se corresponde con el 01 de febrero. Santa Brígida de Irlanda es la patrona de Irlanda, de las vírgenes y de quienes ordeñan vacas o trabajan con productos lácteos. Hay iglesias consagradas a ella en Irlanda, Escocia y otros países europeos, donde su imagen es objeto de ferviente culto.(Ver;porque los católicos adoran imágenes)
Obras de Santa Brígida de Irlanda
Según los relatos biográficos, el más antiguo es el del monje y escritor Cogitosus, del siglo VII, Santa Brígida de Irlanda fue la fundadora del Monasterio de Kildare, regido bajo las Reglas para los monjes y la Regla para las Vírgenes, de San Cesáreo de Arlés, 470-542, para dar estabilidad en cuanto a la permanencia de los monjes y monjas de Kildare, y la consideró más adecuada para su monasterio mixto que la Regla de San Benito Abad.
El monasterio admitía a mujeres y hombres, era un monasterio cohospitae o dúplice, donde hombres y mujeres convivían, aunque en forma separada. Estaba situado en un lugar alejado, sin embargo en torno a el fue formándose, a través de los años, la ciudad de Kildare, por ello Santa Brígida de Irlanda es conocida también como Santa Brígida de Kildare. Su naturaleza era de ser una institución mixta, que no se regia por las reglas de San Agustín de Hipona.
Milagros de Santa Brígida de Irlanda
En los relatos sobre Santa Brígida se narra que ella era una mujer de extraordinaria belleza, pero Santa Brígida hacía oraciones para que Dios le concediera el ser menos agraciada. Su padre, el rey Duptaco la ofreció en matrimonio, a lo que ella se negó, porque su vida estaba consagrada a Jesucristo, para escapar de ese sacramento matrimonial, y ser menos agraciada, se dedico a rezar, y fue cuando uno de sus ojo se le enfermó.(Ver ;cuantos sacramentos existen)
Al ver su insistencia en no casarse y el incidente milagroso por el que se le enfermó un ojo, su padre decidió dejarla libre a ella y a su madre ya que eran consideradas unas esclavas. Su ojo milagrosamente sanó y se libró de contraer matrimonio, luego se dedicó a servir a Jesucristo ayudando a todo aquel que lo necesitase, posteriormente fundaría el Monasterio de Kildare; lugar donde existe el fuego de Santa Brígida el cual es inextinguible según la leyenda.
Los milagros de Jesús, por intercesión de Santa Brígida de Irlanda, están relacionados con la sanación de los males de la vista, la cura de enfermedades infecciosas, ya que sanó a enfermos de lepra. Sus otros milagros son los de lograr que no falte el sustento diario, hacer que las vacas den siempre buena leche, proteger a la doncellas y demás mujeres vírgenes, debido a que fue milagrosamente salvada por unos venados de ser ultrajada.(Ver; milagros de Jesús en la actualidad)
Por su inmensa bondad y su misericordia, de los cuales dan fe sus acciones estando viva, y su poder prodigioso de interceder por sus fieles devotos ante Dios, para conceder milagros, su imagen es venerada en gran parte de Europa y se hallan iglesias consagradas a Santa Brígida de Irlanda, también se le han dedicado templos en Australia, África, Asia y América.(Ver; porque los católicos adoran imágenes si la biblia lo prohíbe)
