Virgen de la medalla milagrosa: Historia, oraciones, significado y más

virgen de la medalla milagrosa

La Virgen de la medalla Milagrosa es un advocación más de la virgen María y comienza con una serie de apariciones a una monja llamada Catalina Labouré, quien fue la escogida para cumplir lo que ella le encomendaría. Su nombre es producto de que la virgen envió a diseñar una medalla para que los fieles sintieran la protección y pudieran recordar cada día la devoción por ella y rezar para fortalecer su fe y fueran cumplidas sus peticiones.

virgen de la medalla milagrosa

En una de sus apariciones ella devela  a la hermana Catalina como debe ser elaborada la medalla y que debía contener específicamente, esto fue en Francia en el convento de las hermanas de la Caridad en el año 1930. Esta joven fue elegida por esta virgen, pues sus  cualidades eran muy notorias, sencilla, humilde y con caridad que también eran los requisitos para pertenecer a este convento.

La medalla tiene  un parte frontal que contiene la imagen la virgen y unas frases que la misma virgen fue quien revelo para que se estampara en esta medalla, por la parte trasera especifica una letra M bastante grande con una cruz y por debajo se puede observar dos corazones encendidos en llamas.

Historia de la virgen de la medalla milagrosa

La mujer que fue escogida por la Virgen de la medalla milagrosa para anunciar sus mensajes perdió a su madre cuando tenia tan solo 9 años, sentía una infinita devoción por María, una vez fue sorprendida abrazando fuertemente su imagen, el día de su primera comunión se pudo observar su gran espíritu de adoración por las cosas de Dios y aunque su padre no estaba muy de acuerdo con que ella ingresara en un noviciado, pudo hacerlo el 21 de abril del año 1830.

virgen de la medalla milagrosa

En este convento empezó a llevar una vida renovada y fortalecida en las cosas del señor, siendo una mujer de buen  corazón, humilde, sencilla y muy caritativa, la llevaron a ser la galardonada para poder ver  las apariciones de la virgen quien vendría a dar protección y esperanza a todo aquel que crea en ella y le reze, la medalla será el símbolo que utilizaran para sentirse acompañados por ella.

Las apariciones de la virgen de la medalla milagrosa fueron tres en la capilla del convento en París, Francia en el año 1830, era de noche en su primera aparición que y un ángel despertó a Catalina diciéndole que fuera hasta la capilla, allí se encontraba la virgen María con quien pudo conversar por unas horas, en esa conversación la virgen le dice que le encomendara una misión. En su segunda aparición lo hizo cuando estaba reunidas con sus hermanas del convento en meditación, cuando escucho un ruido y al voltear pudo observar que se trataba de la virgen de la medalla milagrosa resplandeciente como de costumbre, pero esta vez estaba como en una esfera y con pies aplastaba una serpiente.

Aún se presenta una tercera vez, estaba Catalina en oración y siente un ruido que era el roce de el vestido de seda de la virgen, cuando ella voltea se encontraba en el altar y mirándola le dijo «ya no me veras más». Esta seria sin duda la última aparición de la virgen de la medalla milagrosa. Mira este vídeo.

Significado de la virgen de la medalla milagrosa

Para los creyentes del catolicismo resulta de suma importancia el uso de la medalla que la virgen en sus apariciones pidió que se elaboraran y llevaran colgadas, esta medalla tiene el objetivo de presentar a la virgen como Santa, Inmaculada, Reina y que además intercede para  que sus fieles creyentes alcancen la misericordia de dios y cumpla sus peticiones.

virgen de la medalla milagrosa

La escogida para develar el modelo de como debería ser hecha esta medalla fue a la novicia Catalina, que con su sencilla personalidad y carisma fue merecedora de este galardón y de presenciar las tres apariciones de la virgen de la medalla milagrosa. El significado del anverso de la medalla es el siguiente, María Inmaculada, madre de los hombres, María mensajera, de la ternura de Dios, la vemos de pie, Esta con las manos abiertas y con un actitud acogedora, María es sin pecado, es por ello que aplasta con sus pies la cabeza de la serpiente, también podemos encontrar una oración «Oh María sin pecado concebida rogad por nosotros que recurrimos a vos».

El reverso de la medalla significa el proyecto del amor de dios hacia los hombres, Existe una M grande que esta coronada por una cruz, que significa que María esta unida al ministerio de la pasión y de la cruz de su hijo desde el pesebre y el calvario. Posee también dos corazones que son el de Jesús y el de María que representa esa fuerza grande del amor  que llega hasta la entrega total y por último las doce estrellas que significa que Jesús cuando estuvo en la tierra hecho hombre estableció su iglesia sobre el fundamente de Pedro y sus apóstoles. mira este vídeo.

Oración a la santísima virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

Para orar a la virgen de la medalla milagrosa podemos guiarnos por las oraciones que este articulo dedicado a ella presentamos con la intención de instruir a los creyentes en la fe sin olvidar ni dejar de lado a nuestro creador que el único todopoderoso, primeramente Dios.

Oh María de la Medalla Milagrosa, se mi escudo y protección contra todo mal, que mi alma a través de tu medalla permanezca unida a Ti Madre Milagrosa. Que tu santa medalla me libre de todo mal y peligro, que tu santa medalla me proteja de toda enfermedad.

Que al invocar tu santa oración, oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti, sea yo, mi familia y mis seres queridos protegidos de la muerte imprevista.

Oh María de la Medalla Milagrosa proteje mi hogar de todo desastre natural, mi vida espiritual y todo mi ser, ampárame con tu medalla.

Dichoso aquel que lleve tu medalla porque prometiste una gran bendición.Amén.

Oración a la virgen de la medalla milagrosa para conseguir favores

¡Oh Santísima Virgen Inmaculada,
fuente de piedad y hermosura,
alegría de la gloria, consuelo del cielo!
Benignísima Madre de Misericordia
Hija del eterno Padre,
Madre del Divino Hijo,
Esposa amantísima del Espíritu Santo

y noble descanso de todos.

Os reconozco y venero, oh Reina de los cielos,
como Madre y Señora mía;
vos llena de infinita clemencia y compasión,
desde vuestro trono elevado
volved vuestros ojos bondadosos
hacia vuestros humildes devotos
y dadnos vuestra segurísima y eficaz protección. 

 Oración a la virgen de la medalla milagrosa para casos imposibles

Dios te salve, María,
llena de gracia y bendita más que todas las mujeres,
Virgen soberana y perfecta elegida para Madre de Dios
no solo para vuestra dignidad y gloria
sino también para la salvación nuestra
y provecho de todo el género humano,
venimos con confianza y suplicantes en esta ocasión
para solicitar tu ayuda como madre amorosa
que siempre está dispuesta a socorrer a sus hijos.

¡Virgen de la Medalla Milagrosa!
os elijo, desde ahora y para siempre,
por mi madre, mi abogada y mediadora,
Reina y Señora de todas mis obras,
y protectora y auxiliadora ante la majestad de Dios. Mira este vídeo.

Novena a la virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

Oración preparatoria

Virgen y Madre Inmaculada, mira con ojos misericordiosos al hijo que viene a Ti, lleno de confianza y amor, a implorar tu maternal protección, y a darte gracias por el gran don celestial de tu bendita Medalla Milagrosa.

Creo y espero en tu Medalla, Madre mía del Cielo, y la amo con todo mi corazón, y tengo la plena seguridad de que no me veré desatendido. Amén.

Acordaos, ¡oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio, haya sido desamparado. Animado por esta confianza, a Vos acudo, oh Madre, Virgen de las vírgenes, y gimiendo bajo el peso de mis pecados me atrevo a comparecer ante Vos. Oh madre de Dios, no desechéis mis súplicas, antes bien, escuchadlas y acogedlas benignamente. Amén.

Rezar tres avemarías con la jaculatoria: OH MARÍA, SIN PECADO CONCEBIDA, ROGAD POR NOSOTROS QUE RECURRIMOS A VOS.

Día primero

Comenzar con la oración preparatoria.

En una medianoche iluminada con luz celeste como de Nochebuena -la del 18 de julio de 1830- aparecióse por primera vez la Virgen Santísima a Santa Catalina Labouré, Hija de la Caridad de San Vicente de Paúl.

Y le habló a la santa de las desgracias y calamidades del mundo con tanta pena y compasión que se le anudaba la voz en la garganta y le saltaban las lágrimas de los ojos.

¡Cómo nos ama nuestra Madre del Cielo! ¡Cómo siente las penas de cada uno de sus hijos! Que tú recuerdo y tu medalla, Virgen Milagrosa, sean alivio y consuelo de todos los que sufren y lloran en desamparo.

Día segundo

Comenzar con la oración preparatoria.

En su primera aparición, la Virgen Milagrosa enseñó a Santa Catalina la manera como había de portarse en las penas y tribulaciones que se avecinaban.

«Venid al pie de este altar -decíale la celestial Señora-, aquí se distribuirán las gracias sobre cuantas personas las pidan con confianza y fervor, sobre grandes y pequeños.»

Que la Virgen de la santa medalla y Jesús del sagrario sean siempre luz, fortaleza y guía de nuestra vida.

Meditar y terminar con las oraciones finales.

Día tercero

Comenzar con la oración preparatoria.

En sus confidencias díjole la Virgen Milagrosa a Sor Catalina: «Acontecerán no pequeñas calamidades. El peligro será grande. Llegará un momento en que todo se creerá perdido. Entonces yo estaré con vosotros: tened confianza…»

Refugiémonos en esta confianza, fuertemente apoyada en las seguridades que de su presencia y de su protección nos da la Virgen Milagrosa. Y en las horas malas y en los trances difíciles no cesemos de invocarla: «Auxilio de los cristianos, rogad por nosotros».

Meditar y terminar con las oraciones finales.

Día cuarto

Comenzar con la oración preparatoria.

En la tarde del 27 de noviembre de 1830, baja otra vez del Cielo la Santísima Virgen para manifestarse a Santa Catalina Labouré.

De pie entre resplandores de gloria, tiene en sus manos una pequeña esfera y aparece en actitud estática, como de profunda oración. Después, sin dejar de apretar la esfera contra su pecho, mira a Sor Catalina para decirle: «Esta esfera representa al mundo entero.., y a cada persona en particular».

Como el hijo pequeño en brazos de su madre, así estamos nosotros en el regazo de María, muy junto a su Corazón Inmaculada. ¿Podría encontrarse un sitio más seguro?

Meditar y terminar con las oraciones finales.

Día quinto

Comenzar con la oración preparatoria.

De las manos de María Milagrosa, como de una fuente luminosa, brotaban en cascada los rayos de luz. Y la Virgen explicó: «Es el símbolo de las gracias que Yo derramo sobre cuantas personas me las piden», haciéndome comprender -añade Santa Catalina- lo mucho que le agradan las súplicas que se le hacen, y la liberalidad con que las atiende.

La Virgen Milagrosa es la Madre de la divina gracia que quiere confirmar y afianzar nuestra fe en su omnipotente y universal mediación. ¿Por qué, pues, no acudir a Ella en todas nuestras necesidades?.

Meditar y terminar con las oraciones finales.

Día sexto

Comenzar con la oración preparatoria.

Como marco «¡Oh María, sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!».

Y enseguida oyó una voz que recomendaba llevar la medalla y repetir a menudo aquella oración-jaculatoria, y prometía gracias especiales a los que así lo hiciesen.

¿Dejaremos nosotros de hacerlo?. Sería imperdonable dejar de utilizar un medio tan fácil de aseguramos en todo momento el favor de la Santísima Virgen.

Meditar y terminar con las oraciones finales.

Día séptimo

Comenzar con la oración preparatoria.

Nuestra Señora ordenó a Sor Catalina que fuera acuñada una medalla según el modelo que Ella misma le había diseñado.

Después le dijo: «Cuantas personas la lleven, recibirán grandes gracias que serán más abundantes de llevarla al cuello y con confianza».

Esta es la Gran Promesa de la Medalla Milagrosa. Agradezcámosle tanta bondad, y escudemos siempre nuestro pecho con la medalla que es prenda segura de la protección de María.

Meditar y terminar con las oraciones finales.

virgen de la medalla milagrosa

Día octavo

Comenzar con la oración preparatoria.

Fueron tantos y tan portentosos los milagros obrados por doquier por la nueva medalla (conversiones de pecadores obstinados, curación de enfermos desahuciados, hechos maravillosos de todas clases) que la voz popular empezó a denominarla con el sobrenombre de la medalla de los milagros, la medalla milagrosa; y con este apellido glorioso se ha propagado rápidamente por todo el mundo.

Deseosos de contribuir también nosotros a la mayor gloria de Dios y honor de su Madre Santísima, seamos desde este día apóstoles de su milagrosa medalla.
Meditar y terminar con las oraciones finales.

Día noveno

Comenzar con la oración preparatoria.

Las apariciones de la Virgen de la Medalla Milagrosa constituyen indudablemente una de las pruebas más exquisitas de su amor maternal y misericordioso.
Amemos a quien tanto nos amó y nos ama. «Si amo a María -decía San Juan Bérchmans- tengo asegurada mi eterna salvación».
Como su feliz vidente y confidente, Santa Catalina Labouré, pidámosle cada día a Nuestra Señora, la gracia de su amor y de su devoción.
Meditar y terminar con las oraciones finales.

Letanias a la virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

Señor ten piedad
Cristo ten piedad
Señor ten piedad
Santa María
Santa Madre de Dios
Santa Virgen de las vírgenes
Hija elegida del Padre
Madre de Cristo Rey
Esposa del Espíritu Santo
Virgen hija de Sión
Virgen pobre y humilde
Virgen dulce y obediente
Esclava del señor
Madre corredentora
Llena de gracia puente de la belleza
Compendio de maravillas
Fruto escogido de la Redención
Perfecta discípula de Cristo
Purísima imagen de la Iglesia
Nueva mujer
Mujer vestida de sol
Mujer coronada de estrellas
Señora afable
Señora llena de piedad
Señora nuestra
Alegría de Israel
Esplendor de la iglesia
Orgullo del género humano
Abogada de la gracia
Maestra de piedad
Ayuda del pueblo de Dios
Reina de caridad
Reina de misericordia
Reina de la paz
Reina de los ángeles
Reina de los patriarcas
Reina de los profetas
Reina de los mártires
Reina de los confesores
Reina de las vírgenes
Reina de todos los santos
Reina concebida sin pecado original
Reina llevada al cielo
Reina del mundo
Reina del cielo
Reina del universo
Reina de las familias
Reina del Santo Rosario
Reina y hermosura del Carmelo,
cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo perdónanos. Señor
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo escúchanos, Señor
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo ten piedad de nosotros.

  1. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios
  2. Para que seamos dignos de las promesas de

promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amen

Triduo a la virgen de la medalla milagrosa

Hecha la señal de la Cruz y recitado el Señor mío Jesucristo, se rezará lo siguiente:

Oración para todos los días

Oh María, sin pecado concebida, vedme postrado a vuestras plantas, lleno de confianza. Ese vuestro rostro purísimo, esa amable sonrisa de vuestros labios, esas manos cargadas de celestiales bendiciones, esa actitud amorosa que habéis adoptado para recibir a los que vienen a Vos, esos ojos fijos en la tierra para observar nuestras necesidades y venir en nuestro auxilio, todo, todo me inspira amor, confianza y completa seguridad. Y como si esto fuera poco para alejar de nosotros toda duda habéis empeñado solemnemente vuestra palabra en favor de los que lleven la Santa Medalla, diciendo a vuestra sierva, Sor Catalina Labouré: «Cuantos llevaren esta Medalla, alcanzarán especial protección de la Madre de Dios.»

Madre mía amantísima: Vos sabéis que la llevo sobre mi pecho, que la beso con amor y que os invoco con frecuencia. Realizad, pues, en mí vuestras promesas; venid en mi auxilio, cubridme con vuestra protección, para que Jesús se apiade de mi pobre alma y merezca conseguir por vuestro medio la gracia, que pretendo con este triduo a vuestra Santa Medalla.

Oh María, sin pecado concebida; rogad por nosotros que recurrimos a Vos.

Rezar las oraciones del día que corresponda:

Día primero

Nombre de María

Rezar la oración preparatoria de todos los días.

Entre los recuerdos que la Santísima Virgen ha querido dejarnos en la Medalla Milagrosa, uno de los más singulares es el de su dulcísimo nombre, consignado en la jaculatoria que rodea su sagrada imagen.

Nombre excelso, nombre grande, nombre ilustre y singular, que encierra en sí todas las virtudes con que Dios adornó a María, nombre que calma las aspiraciones de toda la tierra, nombre que anuncia la felicidad a los mortales, nombre que pronuncian con entusiasmo los Angeles, que regocija a la corte celestial; nombre de quien podemos decir con San Bernardo que no es un nombre vacío de significación, como el de los héroes del mundo, sino que encierra en sí la más positiva grandeza. Nombre dulcísimo, que suaviza los males del hombre y es el apoyo más sólido de sus esperanzas, la prenda mas segura de su porvenir.

¡Oh María! Cuál seréis Vos misma, si solo vuestro nombre es tan amable y tan gracioso? ¡Oh Santísima Virgen María!, exclama San Bernardo, vuestro nombre es tan dulce y amable, que no puede pronunciarse sin que deje inflamado de amor y favorecido al que lo nombra. Nombre augusto de María, tu serás para mi alma la escala bendita que la conducirá al reino de los Cielos.

Aquí expondrá cada uno a la Virgen la gracia que desee conseguir en este Triduo, rezando después tres Avemarías precedidas de la jaculatoria: ¡Oh María, sin pecado concebida; rogad por nosotros que recurrimos a Vos!

Oración de San Atanasio

Acoge, oh Santísima Virgen, nuestras súplicas y acuérdate de nosotros. Dispénsanos los dones de tus riquezas. El Arcángel te virgen de la medalla milagrosasaluda llena de gracia. Todas las naciones te llaman bienaventurada, todas las jerarquías del Cielo te bendicen, y nosotros, que pertenecemos a la jerarquía terrestre, decimos también: Dios te salve, oh llena de gracia, el Señor es contigo, ruega por nosotros, oh Madre de Dios, nuestra Señora y nuestra Reina. Amén.

Día segundo

Concepción de María

Rezar la oración preparatoria de todos los días.

Después del nombre de María, aparece en la Medalla Milagrosa el misterio de su purísima Concepción, el más glorioso privilegio de cuantos le concedió la Augustísima Trinidad.

Esta Medalla nos recuerda constantemente sus triunfos sobre la infernal serpiente, hollando con el mayor denuedo la orgullosa cabeza de Lucifer y rompiendo las duras cadenas con que estaban aprisionados los hijos de Adán.

Por lo mismo, la Medalla Milagrosa, al confesar el misterio de la Concepción Inmaculada de María, nos predica que la Santísima Virgen es la corredentora del universo, la tesorera de los dones del Altísimo, la fiadora entre Dios y los hombres, la que realizó del modo más singular la paz y reconciliación del género humano.

Ya no podemos extrañar que la Santísima Virgen al ser invocada con una oración que tan alto predica sus grandezas, haya querido vincular en ella toda suerte de favores. Recordemos, una vez mas, sus palabras: «Cuantos piadosamente llevaren esta Medalla y devotamente rezaren esta oración: ¡Oh María, sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!, alcanzarán particular protección de la Madre de Dios. Repitamos, pues, sin cesar, esa hermosa jaculatoria. Sea ella el suave y delicioso alimento de nuestras almas. Resuene en todos nuestros peligros, en nuestras angustias, en nuestras alegrías, y sobre todo en la hora de nuestra muerte: ¡Oh María, sin pecado concebida, rogad por nosotros, que recurrimos a Vos!. Así sea.

Petición, como el día primero

Oración de San Andrés

¡Oh María!, si pongo mi confianza en Ti, seré salvo; si me hallare bajo tu protección, nada he de temer, porque ser tu devoto es tener armas seguras de salvación, que Dios concede a los que quiere salvar.

¡Oh Madre de misericordia!, intercede por nosotros y en la hora de nuestra muerte recíbenos en tus brazos y presenta nuestras almas a tu divino hijo, Jesús, y esto será bastante para que El nos mire con amor y nos reciba en su reino. Amén.

Día tercero

Protección de María

Rezar la oración preparatoria de todos los días.

La Medalla Milagrosa, al confesar el misterio de la Concepción Inmaculada de María, garantiza a la vez el auxilio divino a cuantos la llevan puesta. La Santísima Virgen, dice San Bernardino, es muy cortés y agradecida, tanto que no le permite su corazón que el hombre la salude sin devolver el saludo de una manera inefable.

Esta súplica: «Rogad por nosotros, que recurrimos a Vos» ha venido a ser fuente sagrada de vida, de gracia y de santidad; remedio de todas las enfermedades, consuelo de los afligidos y dulce esperanza de los pecadores.

Acudamos, pues, a María, en todas nuestras necesidades de alma y de cuerpo. Invoquémosla y digamos con frecuencia: «¡Oh María, sin pecado concebida, rogad por nosotros, que recurrimos a Vos!», y esta oración tan grata a la madre de Dios, será suficiente para aliviarnos y socorrernos. Si la enfermedad viene a visitarnos, ella nos curará, si la salud nos conviene, y de no convenimos nos concederá la gracia de soportar el dolor con cristiana resignación. Si el desaliento quiere apoderarse de nosotros y la tristeza sumergirnos en un mar de desolación, repitamos la jaculatoria de la Medalla, y la Virgen nos consolará, porque es Madre de los afligidos, alivio de nuestros males y eficaz remedio para todos los sufrimientos del humano corazón. Con el apoyo de María viviremos confiados lejos de la culpa y nuestra muerte será preciosa a los ojos del Señor. Así sea.

Petición, como el día primero.

Oración de San Germán

¡Oh mi única señora y único consuelo de mi corazón! Ya que eres el celestial rocío que refrigera mis penas; Tú que eres la luz de mi alma cuando se halla rodeada de tinieblas; Tú que eres mi fortaleza en las debilidades, mi tesoro en la pobreza y la esperanza de mi salud, oye mis humildes ruegos y compadécete de mí, como corresponde a la Madre de un Dios, que ama tanto a los hombres. Concédeme la gracia de gozar contigo en el Cielo, de vivir contigo en el Paraíso. Yo sé que siendo Tú la Madre de Dios, si quieres, puedes alcanzarme esta gracia; así lo espero de tu misericordia. Amén.

Himno a la virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

La llevo en mi pecho porque prometiste
al que la portara una gran bendición.
Tu santa Medalla, me acompaña siempre
a Tí buena Madre, me entrego hoy

Los rayos son tus gracias, ¡Milagrosa!
que a todos Tú derramas, ¡Milagrosa!
y brotan de tus manos, ¡Milagrosa!
acogen a tus hijos, ¡Milagrosa! .

El pueblo confiado a Tí clamó
tu gracia divina y tu bendición
las doce estrellas, los dos corazones
la cruz y la eme son la redención
Los rayos son tus gracias, ¡Milagrosa!

¡Oh María concebida sin pecado
ruega por nosotros que acudimos a Tí !
Amén Mira este vídeo.

https://www.youtube.com/watch?v=draMdfTrbB0

Apariciones dela virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

La primera aparición de la virgen de la medalla milagrosa tuvo su origen en Francia en un convento donde se encontraba una novicia de noble y humilde corazón de nombre Catalina, un 18 de julio del año 1830 un ángel la despertó y le dijo que fuera a la capilla, cuando llego a este lugar pudo observar que se trataba de la presencia de la virgen María, ella se arrodilla y la virgen exclama que se le enmendara una misión que no tema aunque pase por sufrimiento.

En la segunda aparición Sor Catalina se encontraba en sus acostumbradas oraciones de la tarde, era un 27 de noviembre del año 1830 cuando la virgen se le presenta nuevamente de pie sobre una semi esfera terrestre y se veía como con sus pies aplastaba una serpiente, en sus manos también tenia una esfera dorada que la mantiene elevada ofreciendola a Dios, existe una segunda visión donde ve a la virgen emanar unos rayos de sus manos, por último ella ve como se forma un ovalo como si fuera una medalla y esta mujer llamada catalina pude ver como en letras de oro se inscribia esta oración «Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a Vos».

virgen de la medalla milagrosa

 

En ese momento la medalla da un giro y pudo observar Catalina que tenia por la parte de atras, una letra M gigante con una corona, debajo dos corazones uno que esta rodeado de espinas y el otro atravesado por una espada, es en ese momento cuando Catalina entiende cual es su misión y le dice: » Haz acuñar una medalla según este modelo. Las gracias serán abundantes para las personas que la lleven con confianza»

La virgen de la medalla milagrosa hace una tercera y última aparición, Catalina se encontraba orando con las hermanas el convento cuando hace su aparición la virgen haciéndole el recordatorio a esta mujer de lo que debía hacer con la medalla “Haz acuñar un Medalla según este modelo“. Mira este vídeo.

Milagros de la virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

Son muchos los milagros atribuidos a la virgen de la medalla milagrosa, a través de la medalla que ella misma encomendó a Catalina para que se fabricara y los fieles llevaran colgada como símbolo de fe y compañía, han recibido los favores alcanzados a través de oraciones y suplicas.

Ana Hernández  es testimonio fiel de como la virgen de la medalla milagrosa cumplió sus peticiones, dice que su esposo se hizo adicto a las drogas y por este vicio termino en la cárcel, esta realidad la hizo desesperarse hasta el punto de querer dejarlo y abandonar todo, pero estaba consciente de que el había sido un buen esposo, buen padre y buen hijo por lo que decidió recurrir a la oración y pidió con fervor a la virgen de la medalla milagrosa por su esposo quien a los pocos días salio de la cárcel y se dispuso en un tratamiento de rehabilitación es por eso que agradece todos lo días por este milagro y siempre lleva consigo la medalla que la motivo a seguir luchando.

Otro testimonio de la señora Luisa Perez dice que su hermana empezó con un severo dolor y luego de llevarla al hospital los médicos determinaron que debían operarla de emergencia del corazón en ese momento nos desesperamos y comenzamos a rezar a la virgen de la medalla milagrosa, a los días dieron de alta a mi hermana y no hubo necesidad de tal operación lo que es un verdadero milagro que agradecemos todos los días a la virgen.

El señor Carlos Albornoz dice que tenia ciertas limitaciones porque sufrió un derrame cerebral, comenzó a rezarle a la virgen en poco tiempo empezó a ver una mejoría increíble ahora puedo hacer todos mis quehaceres con total normalidad, la virgen de la medalla milagrosa cambio mi vida por completo.

Consagración a la virgen de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

 

Postrado ante vuestro acatamiento, ¡Oh Virgen de la Medalla Milagrosa!, y después de saludaros en el augusto misterio de vuestra concepción sin mancha, os elijo, desde ahora para siempre, por mi Madre, Abogada, Reina y Señora de todas mis acciones y Protectora ante la majestad de Dios. Yo os prometo, virgen purísima, no olvidaros jamás, ni vuestro culto ni los intereses de vuestra gloria, a la vez que os prometo también promover en los que me rodean vuestro amor. Recibidme, Madre tierna, desde este momento y sed para mí el refugio en esta vida y el sostén a la hora de la muerte. Amén.

Virgen de la medalla milagrosa en Paris

Como sabemos la virgen de la medalla milagrosa hace sus apariciones en Francia, Paris donde existe un santuario en su honor donde todos los fieles devotos asisten para rezarle y pedirle que le conceda favores. La virgen de la medalla milagrosa fue muy clara en sus apariciones y dejo mensajes de fe y renovación en la esperanza de los feligreses. Uno de sus mensajes dice que ella fue concebida si pecado , Inmaculada, nos regala su tercera arma de madre, su medalla milagrosa y recordarnos que existe como armas también el rosario y el escapulario.

Virgen inmaculada de la medalla milagrosa

virgen de la medalla milagrosa

La virgen inmaculada de la medalla milagrosa nos recuerda que ella nació fuera del pecado, santa, reina y quiere que seamos sus devotos y pidamos e intercedamos para que podamos alcanzar los favores que pedimos. Esta virgen es un advocación de la virgen María así como la virgen de Fátima, la virgen de Guadalupe, la virgen de  Lourdes, la virgen del carmen, la virgen de Loreto. 

La virgen de la medalla milagrosa nos dejo esa medalla como un preciado tesoro para siempre llevarlo colgado y ser protegidos y tener presente la misericordia que puede tener con cada ser humano si le reza y es devoto, en este articulo podemos encontrar una serie de oraciones para cada situación, además del rosario y letanías que se rezan a a esta virgen apara alcanzar sus favores.