La oración a San Pancracio y el perejil es muy conocida por sus devotos. En la mayoría de los casos, es realizada por personas que requieren con suma urgencia de un nuevo empleo. A lo largo de su vida le costó conseguir empleo. Sin más preámbulo, descubre todo lo relacionado aquí.
Ritual para la oración a San Pancracio y el perejil
San Pancracio es conocido por ser el protector de todos los niños del mundo. Además de ello, funge como amuleto para todos los trabajadores del mundo entero. Si requieres salir de una mala racha económica o para hallar ese empleo que se te hace costoso, es momento de poner en práctica el ritual para la oración de San Pancracio y el perejil.
En la iconografía, Pancracio siempre está rodeado de plantas medicinales o naturales, pero principalmente de perejil. Hay que destacar que el perejil ha sido tratado por los investigadores como la rama que siempre acompaña a todos los mártires en su lecho de muerte. Si quieres que la suerte regrese a tu vida, es momento de encontrar la figura de San Pancracio para el ritual. No obstante, la santa muerte dorada también atrae esa prosperidad perdida.
Ahora se explicará el procedimiento para el ritual para la oración a San Pancracio y el perejil.
Procedimiento
- Como se sugiere en párrafos anteriores, es importante tener la imagen de San Pancracio.
- Buscar un vaso y llenarlo con agua. De igual forma puede estar el vaso medio lleno.
- 3 monedas.
- Perejil en abundancia. Procura que la planta esté en buen estado.
- Un plato de vídrio o cerámica para depositar las hojas de perejil.
- Velas amarillas o blanca, el color queda bajo el criterio del orador.
- Rezar la oración a San Pancracio y el perejil con suma fe (ver: oración de fe).
Ahora bien, todos estos utensilios deben estar bajo resguardo, es decir, en un lugar secreto donde sólo tú sepas de su conocimiento. El vaso con agua debe estar frente a la imagen de San Pancracio. Acto siguiente, las monedas deben despositarse en el vaso con agua, hasta que las mismas toquen el fondo del recimiento con el líquido.
Posteriormente, corresponde iniciar la oración a San Pancracio y el perejil.
Oración a San Pancracio y el perejil
Oh San Pancracio sagrado, tú que formas parte de la numerosa lista de mártires santificados. A través de ti, el Señor ha intervenido para escuchar cada uno de estos ruegos que vengo a hacerte con gozo y alegría. Pido el apoyo para seguir contando con la confianza de Dios, para que en mi hora de partir, logre subir las escaleras celestiales que conducen al paraíso.
Hoy en especial, me siento con mucha aflicción y ansiedad, porque me encuentro sin trabajo fijo y en donde acudo con mi solicitud, soy negado(a). Si me has de favorecer con trabajo digno, te serviré de manera fiel, para ser testimonio de esta devoción incalculable que siento al venerar tu sagrada imagen.
Vela por mi alma entristecida y e interfiere para que ese aspecto cambie. Por el poder de tu perejil, cuya rama acompaña a todos los mártires del cristianismo, qué logre conseguir trabajo. Deseo mantener a mi familia por todas las de la ley. Direcciona mi amor hacia Cristo, para jamás poder faltar a su palabra (ver: oración de fe para aceptar a Cristo).
Para compartir la importancia de la oración a San Pancracio y el perejil también puedes rezar la oración a San Miguel Arcángel para conseguir trabajo.
Oración a San Pancracio y el perejil para el dinero
-Oh buen Pancracio, quien a través de las hojas de perejil lograste la última súplica de tu vida. En visto de esas imploraciones a Dios, me acerco hasta ti con el firme propósito que multipliques todo mi dinero. Se el benefactor de toda mi fortuna, con la cual podré mantener a mi familia y sostener en buena manera mi trabajo y todo lo que ello implica.
Pancracio bendito, escucha con firmeza de estas humildes intenciones. No dejes que derroche el dinero con tanto sacrificio me he ganado. Aléjame de todas aquellas cosas vanas que significan elementos efímeros. Haz que logre invertir mi dinero en cosas productivas que lo multipliquen mucho más.
Que la ruina económica no toquen las puertas de mi casa, oh Señor. Tú que ayudaste a multiplicar los panes a todos los pobres, de lo mismo espero con mi dinero, para que no me falte. Pancracio, por el poder del perejil abundante, me despido ante ti con la esperanza de ser atendido(a). Amén.
