La cruz de San Benito es un objeto muy preciado para la comunidad que adora este santo y del mundo entero. Con ella nos podemos proteger de la maldad y de las tentaciones en las que nos vemos envueltos a menudo. Descubre la oración a la cruz de San Benito y cómo hacerla aquí.
Pasos para hacer la oración a la cruz de San Benito
Aprende en este interesante artículo sobre cómo hacer la oración a la cruz de San Benito. Como paso fundamental, el devoto debe tener en su poder el valioso objeto. Ya una vez con la cruz de san Benito en mano, lo siguiente es buscar una habitación apta para rezar con tranquilidad y comodidad. La habitación puede permanecer semi-oscura, pero no por completo.
El lugar debe permanecer en absoluto silencio, porque la oración a la cruz de San Benito es muy potente. Cualquier oración en nombre del objeto debe enmarcarse en total concentración. Sería interesante que la persona tenga una imagen sólida o impresa de San Benito de Nursia sobre un mesón.
Otro aspecto que no puede perderse de vista es el aprendizaje de todas las siglas que contiene la cruz de San Benito (ver: medalla de San Benito). Estas iniciales permiten formar oraciones que son muy protectoras que permiten sanar a la persona ante cualquier asecho del demonio.
Una buena idea antes de hacer la oración a la cruz de San Benito, es solicitar los consejos de un sacerdote. Él mejor que nadie sabrá cómo asesorar a la persona que hará la plegaria para alimentar su fe (ver: oración de fe) y de esta manera apegarse en las virtudes del objeto. Es mejor hacer las cosas bien, con ayuda de un experto profesional como un cura, no habrán problemas con sus sabios consejos.
Oración a la cruz de San Benito en latín
Generalmente, la oración a la cruz de San Benito en latín, coincide en buen grado con la oración para la medalla del santo. Esta plegaria es muy breve, pero su prontitud en la lengua latina hace de ela la más implorada por los fieles. Conoce la oración a la cruz de San Benito en latín:
“Crux sancti patris benedicti. Crux sacra sit mihi lux. Non Draco sit mihi dux. Vade retro, Satanas!. Nunquam suade mihi vana. Sunt mala quae lebas. Ipse venena bibas”
Como se detalla arriba, es una oració muy concisa, pero tan poderosa que es capaz de suprimir el demonio que mantiene aprisionado el cuerpo del feligrés. Generalmente, es predicada por el párroco de la región en compañía de un testigo y de la víctima. Ahora corresponde ver la traducción al español, que puede variar según la interpretación del intérprete.
Gran Dios Todopoderoso, que con la ayuda de la cruz de San Benito, que es el padre benedicto. Anhelo que tu majestuosa cruz sea la luz liberadora. Ahuyenta al demonio, para que jampas sea el guía del destino. ¡Apártate, Satanás!. De ti no quiero las cosas que son vanas. Todo lo que te rodea está lleno de mucha maldad, así que trágate tu veneno.
Oración a la cruz de San Benito para exorcismo
Con la siguiente oración a la cruz de San Benito, podrás solicitar la ayuda de un especialista para exorcisar a un conocido, familiar o amigo. La plegaria es muy fuerte, por tanto, debe surtir efecto en la persona a exorcisar. Cuenta la leyenda que en los primeros años de fundada la abadía de San Benito, los monjes solventaban exorcismos para quienes lo necesitaban.
-Oh San Benito, San Benito, San Benito poderoso. Santo poderoso, piadoso y misericordioso. En nombre de Dios y de su hijo Jesús, te invoco para que liberes de toda maldad y energía negativa a (Nombre de la persona para liberar con exorcismo). Cristo, Cristo, Cristo. Eres luz entre las tinieblas. Representas la luz que ilumina nuestros caminos. Te imploro bajo tu nombre que Satanás renuncie al cuerpo de (Nombre de la persona) para que vuelva a su vida habitual.
Vete, Satanás! Fuera de este cuerpo. No sigas seduciendo a este(a) hermano(a) con tus tentaciones vanas. Bebe de tu propio veneno, fuera de este cuerpo. Vete hacia donde la maldad no siga persiguiendo a esta criatura cristiana. Cristo. Señor. Poder. Bajo el poder de los 4 elementos: agua, aire, tierra, fuego. Saca a este(a) hermano(a) de las tinieblas y que los brazos de Dios le protejan de las garras infernales.
En la medida que se va rezando la oración a la cruz de San Benito, el párroco esparce con agua bendita el cuerpo de él/ella. También es imprescindible aplicar la señal de la cruz en todo momento en su frente y cuerpo.