La iglesia católica se autodenomina la iglesia universal y que es la iglesia que fundaron los apóstoles que fueron los primeros cristianos después de la muerte de Cristo, pero en realidad ¿ quienes forman la iglesia catolica en la actualidad ?
Puedes leer sobre actividades para monaguillos dentro de la liturgia, si entras en este enlace.
La Iglesia católica posee una distribución jerárquicamente construida, pero no se trata de un ejercicio de la autoridad
al uso, como el que se puede dar en cualquier empresa o institución.
La tarea fundamental de cualquier cristiano católico y romano, desde el postrero bautizado hasta el mismísimo Papa,
es perennemente la misma, proclamar del Evangelio y la actuación de la misericordia.
Entérate de quienes forman la iglesia catolica en la actualidad
A pesar de eso, internamente en la Iglesia hay una multiplicidad de autoridades, cuyos compromisos y labores
están normados por el Código de Derecho Canónico en el texto que se reseña al «Pueblo de Dios», precisamente,
la sección II sobre «La constitución jerárquica de la Iglesia».
Si deseas saber que hacian los cristianos después de haber sido bautizados, ingresa en este enlace y lo sabrás.
Es por eso que la jerarquización queda de la siguiente manera:
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El Papa.
Designado por los cardenales votantes durante el cónclave o asamblea.
El Papa simboliza a Cristo en la Tierra, es por esa razón que se le llama el Vicario (representante) de Cristo.
Es en el Santo Padre donde subsiste la ocupación que el Señor encargó especialmente a Pedro, quien fue el
primero entre todos los demás apóstoles.
Al mismo tiempo es la cabeza de la academia de obispos, que le suministran su colaboración de diferentes modos,
de igual manera que los cardenales.
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Los cardenales.
Son «establecidos» por el Papa.
Los que gozan de menos de 80 años de edad consiguen elegir al novel Pontífice en caso de que se oficie el Cónclave.
Ayudan al Santo Padre tanto colegialmente, cuando son citados para abordar asociados asuntos de más jerarquía,
como de manera personal, a través de los diferentes cargos que representan, apoyando al Pontífice sobre todo en su
gerencia habitual de la Iglesia católica.
Todos estos quienes forman la iglesia catolica en sus diferentes jerarquías.
Una de las maneras para ser nombrados y postulados para ser cardenales es suficiente con ser sacerdote, sin embargo
el aspirante convendrá tomar la disposición episcopal precedentemente de obtener el anillo y la birreta de manos
del Santo Padre.
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Los obispos.
Ejecutan un trío de trabajo: instruir, consagrar y regir una fracción de la Iglesia con un juicio propio, como cada
uno de los beneficiarios de los Apóstoles.
Ningún obispo, no obstante disfrute de haber sido escogido cardenal, tiene potestad sobre otro, sino que cada
uno obedece concisamente del Papa.
También puedes profundizar sobre que actividades para monaguillos hay en la liturgia, accediendo a este enlace.
En sus concernientes diócesis, son garantes de velar a sus presbíteros; atender que desempeñen apropiadamente los
compromisos propios de su estado, y de que cuenten con aquellos medios e establecimientos que precisan para el
aumento de su vida intelectual y por supuesto espiritual.
Auxiliados por los clérigos, sus copartícipes, y por los eclesiásticos, los obispos poseen la labor de instruir legítimamente
la fe, de proclamar el culto, sobre todo la Sacramento de la comunión, y de regir su Iglesia como efectivos pastores.
Para poseer el privilegio ser escogido como obispo se demanda que el solicitante sea: insigne por la estabilidad de su fe,
que posea compasivas prácticas, debe tener buena popularidad y que tenga con al menos treinta y cinco años.
Asimismo debe contar con cinco años como presbítero y tener un doctorado o por lo menos ser licenciado en teología o
derecho canónico o Sagrada Escritura, ser efectivamente versado en esas enseñanzas.
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Los párrocos.
Es el sacerdote de la parroquia que se le entrega, y practica el trabajo pastoral de la sociedad que le está encargada
bajo el mando del obispo diocesano.
Entre sus labores está la de familiarizarse a las feligresías que se le recomiendan.
Para ello, entrevista las familias, visita a los enfermos, principalmente a los agonizantes, confortándolos con la
administración de las comuniones. Asimismo cuida de los pobres y de los que soportan personales problemas.
Y los últimos quienes forman la iglesia catolica son:
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Los fieles laicos.
Si quieres saber como hacer sermones de la iglesia de cristo, entra en este enlace.
Son los comisionados de detectar o de imaginar los medios para empapar de vidas cristianas las situaciones sociales,
así como las políticas y hasta las económicas.
Están emplazados a ser manifestantes de Cristo en todas las cosas que hagan, y además en lo entrañable de la sociedad.
Es así de esta manera que nos damos cuenta de quienes forman la iglesia catolica en la actualidad.
Como nos hemos dado cuenta la iglesia católica está ordenada de manera que cada persona cumpla con
ciertas especificaciones en las tareas asignadas y de esta manera puedan distribuirse las actividades.
Y entendemos que la autoridad mayor dentro de la iglesia católica es el papa o vicario de Cristo como es llamado.
Quedando entendido esto, las personas que son fieles, como se ve claramente, no entran en esta cadena de mandos.
Sino que quedan de últimos en esta jerarquía, cumpliendo labores menores dentro de la iglesia.
Posiblemente ayudando a los sacerdotes o diáconos en las tareas propias de la iglesia.
Así como es el caso de los monaguillos, diáconos y otras personalidades que no están tan altos en la rama jerárquica.
Ahora nos queda perfectamente claro quienes forman la iglesia catolica dependiendo de su jerarquía.
Y evidentemente también forman parte de la iglesia católica todos y cada uno de los fieles que son practicantes
de su creencia tanto en los mandamientos bíblicos como los que demanda la santa iglesia católica, apostólica
y romana, que aunque no forman parte de la cadena de jerarquía, son la razón de ser de la iglesia.
Pues fue precisamente por ellos que Cristo murió en la cruz del Calvario, para darles la Salvación por medio de su
sangre a todos aquellos que decidan recibirlo en sus vidas como su Salvador personal.