Las tradiciones se originan desde hace muchos años, y es responsabilidad de cada uno si desea continuarlas o no, pero, la del Peregrinaje de las siete iglesias de Roma, es imposible no cumplirla. Esta es una hermosa ciudad, en donde, además, puedes conocer sorprendes lugares.
Historia del Peregrinaje de las siete iglesias de Roma
El Peregrinaje de las siete iglesias de Roma, también es llamado tour, o la ronda de las siete iglesias, o como mejor se conoce en el idioma italiano Visita delle Sette Chiese. Es un recorrido que se realiza con la finalidad de visitar diferentes santuarios de gran importancia religiosa para sus seguidores, se puede realizar en compañía de un grupo de personas o de forma individual.
Este recorrido es una de las tradiciones que se establecen dentro de la ciudad de Roma, consiste en visitar las siete iglesias más grandes y antiguas, esto debe hacerse caminando.
Es una tradición que nace gracias a la idea de San Felipe Neri, quien para ese momento se conocía como ‘‘Apóstol de Roma’’ en el año 1540.
El objetivo de esto es que los jóvenes que estaban a su cargo, llegaran hasta esa ciudad y observaran con detalle lo que hacía mientras desempeñaba sus labores, así, mientras se encontraban juntos realizaban varias actividades como: rezar, cantar, divertirse, y, al mismo tiempo, profundizar todo el tema de la fe y religión.
Sin embargo, hay quienes relatan que San Felipe Neri, no fue quién realmente inventó este recorrido, sino que, retomó las ideas antiguas de visitar las tumbas de Pedro y Pablo como una tradición medieval.
Sus inicios
Entonces San Felipe Neri en compañía de otros discípulos, y San Ignacio de Loyola comenzaron con el recorrido por las siete iglesias de la ciudad, específicamente el 22 de abril un año después de haber tenido la idea en su mente.
Justamente ese mismo día los seis jesuitas que lo acompañaban comenzaron dentro del mundo religioso como profesionales, en la capilla del Santísimo Sacramento de la Basílica de San Pablo Extramuros. Un hecho positivo, además de interesante para toda la historia, no solo de las siete iglesias sino de toda la religión.
Sin embargo, en el año 1550 mientras se llevaba a cabo el año jubilar (celebración de varias iglesias con un año sabático por motivos diferentes), es cuando realmente este recorrido comienza a tener importancia dentro de la ciudad. Y, para el año 1559, ya se consideraba como una verdadera práctica que necesitaba de mucha organización.
En sus inicios la duración de este recorrido era desde el miércoles hasta el jueves santo, solo dos días. Sin embargo, para 1575 los viajes al santuario se hicieron más obligatorios, y para tener la indulgencia plenaria del Jubileo, era un requisito fundamental.
Es por esto que, se establece que el recorrido debe realizarse durante los 365 días del año, y, no únicamente dos días como anteriormente se estaba llevando a cabo. Sin embargo, más adelante los requisitos eran más flexibles.
En el año 1595 las siete iglesias que debían recorrerse ya estaban establecidas dentro de la guía del autor Girolamo Franzini, llamada Le Cose Maravigilose dell’alma cita de Roma. Las mismas deben ser: la de San Juan de Letrán, San Pedro, San Pablo Extramuros, Santa María la Mayor, San Lorenzo Extramuros, San Sebastián, y Santa Cruz de Jerusalén.
¿Cuándo se realiza el Peregrinaje de las siete iglesias de Roma?
Anteriormente, estaba establecido que la visita debía llevarse a cabo durante dos días, en donde se comenzaba el recorrido el miércoles santo por la noche, partiendo desde Santa María in Vallicella, y continuando en dirección a San Pedro, para que los peregrinos también hicieran un recorrido por el Hospital de Santo Spirito in Sassia, y, así orar por todos los enfermos.
Sin embargo, en la actualidad todo el recorrido de las siete iglesias de Roma se realiza un único día, cada 6 meses, específicamente en los meses de mayo y septiembre.
Debe realizarse justo antes de que comience la fiesta del santo, y después de la misa de las 19:00 horas en Santa Maria in Vallicella, para culminar en la Basílica de Santa María Mayor.
Recorrido
El recorrido debe comenzar en el momento que finaliza la primera misa de la iglesia de Santa María in Vellicella, para posteriormente continuar con la basílica de San Pedro que es donde inicia la visita realmente.
- La Basílica de San Pedro es considerada como la iglesia más importante de todo el mundo, además, es la sede principal en donde se encuentra el Papa. Pero, no solo esto, en su interior también tiene muchas obras de arte sorprendentes para los espectadores.
Generalmente, la visita de esta iglesia finaliza visitando la tumba de los Papas. En esta iglesia han estado Bramante, Miguel Ángel, Giacomo della Porta y MAderno, Rafael y Antonio de Sangallo el Joven.
Conoce más sobre la Basílica de San Pedro, La gran iglesia católica en el Vaticano
El recorrido continúa pasando por la costa del Lungotevere, hasta llegar al cruce Viale Guglielmo Marconi, en donde encuentras la Basílica de San Pablo Extramuros.
- La Basílica de San Pablo Extramuros se encuentra ubicada en la vía Ostiense, su construcción se llevó a cabo justo en el mismo lugar en donde fue sepultado Pablo de Tarso. En el año 1823 la estructura se destruyó debido a un incendio generado en ese mismo año, y después en 1826, gracias a la ayuda de todos los creyentes fue reconstruida.
La historia de esta iglesia es muy popular debido a que se encuentran los retratos de todos los Papas, y, también una Pinacoteca. Desde ese lugar, debes recorrer hasta la Via delle Sette Chiese, o en español conocida como la calle de las Siete Iglesias, hasta llegar a la tercera que se encuentra en la Via Appia Antica; como referencia tienes el Parque de la Caffarella y las catacumbas.
- Basílica de San Sebastián Extramuros, es una de las iglesias más hermosas del mundo, además tiene restos arqueológicos muy interesantes. En su interior lo primero que llama tu atención es su techo tallado de madera.
En la Capilla de las Relíquias se encuentra ubicada una de las flechas con las que martirizaron a San Sebastián, además, también encuentras la piedra con las huellas de Cristo del Domine quo vadis.
Antes de dirigirte a la otra Iglesia, no puedes dejar de visitar el Jardin Mattei, conocido actualmente como Villa Celimontana.
- Basílica de San Juan de Letrán también es conocida como la madre de todas las iglesias, esto debido a que es parte de una gran cantidad de monumentos en donde se incluye el Palacio de Letrán, el obelisco y el Santuario de la Escalera Santa.
En su interior se pueden observar diferentes obras como el célebre fresco de Giotto, que claramente representa al Papa Bonifacio VIII cuando anunciaba el primer Jubileo en el año 1300.
Cuando finalizamos esta parte del recorrido, no debes olvidarte de pasar por el Santuario de la Escalera Santa, en donde podrás observar detalladamente los 28 escalones que la conforman, y solo los fieles creyentes pueden apoyar sus rodillas allí.
- Basílica de la Santa Cruz en Jerusalén, para llegar a esta quinta estación puedes dirigirte por la avenida arbolada de Viale Carlo Felice. Es una de las más reconocidas, debido a que en su interior contiene hermosas reliquias, una copia exacta del Santo Sudario, y algunos mosaicos.
Además de eso, en la capilla de las Reliquias existen algunos fragmentos de la Cruz de Jesús, algunas partes de su corona de espinas, uno de los clavos y el Titulus crucis.
Después de terminar este recorrido, justo detrás del cementerio Monumental del Verano, puedes encontrar la Basílica de San Lorenzo Extramuros.
- Basílica de San Lorenzo Extramuros, en su interior puedes encontrar la Tumba de San Lorenzo, quién fue martirizado en el año 258 después de Cristo, mientras se encontraba el imperio de Valeriano. También, están las reliquias de San Esteban, algunos personajes importantes para Italia, y cinco Papas.
Lo que más llama la atención de este templo, es que se construyó utilizando como base la unión de dos iglesias, una paleocristiana, y la otra ideada por el Papa Pelagio II.
Al salir de la iglesia número 6, debes dirigirte a la Plaza homónima y la Plaza del Esquilino, en donde vas a encontrar la última parada muy cerca de la estación de Termini.
- Basílica de Santa María Mayor, el campanario de esta iglesia es el más grande de toda la capital, midiendo 75 metros, en su interior puedes observar grandes esculturas, frescos y mosaicos.
Su techo es elaborado con madera dorada, y es una obra de Giuliano da San Gallo, es una gran estructura proveniente de la arquitectura paleocristiana.
Finalmente, has terminado todo el Peregrinaje de las siete Iglesias de Roma, solo debes asegurarte de no perderte ninguna de las obras grandiosas que tiene cada una de estas iglesias para que las visites. Además, es un recorrido lleno de mucha fe, en donde puedes incluso conocer personas que tengan los mismos pensamientos y creencias que tú.