San Francisco de Sales fue un Obispo de Ginebra, que es considerado como santo en la iglesia católica, es conocido a causa de Su Gran fe y por poseer un enfoque gentil hacia las divisiones religiosas que se encontraba en su tierra conoce estos datos y más a continuación.
Biografía De San Francisco de Sales
San Francisco de Sales nació el 21 de agosto de 1567 en el Château de Sales en una noble familia de Sales en Francia. Su padre era François de Sales, Señor de Boisy, Sales y Novel.Por su parte su madre era Françoise de Sionnaz, la única hija de un magistrado prominente era hijo de una Familia pudiente igual que San Pancracio.
Fue bautizado como Francisco Buenaventura, después de dos grandes santos franciscanos, (Ver: San Francisco de Asís) fue el primero de seis hijos, asistió a las mejores escuelas para prepararse en una carrera como magistrado.
Por lo tanto, disfrutó de una educación privilegiada en la cercana ciudad de La Roche-sur-Foron y a la edad de ocho años, en el colegio de los Capuchinos en Annecy.
En 1583, salió de Sales hacia el Collège de Clermont (más tarde renombrado Lycée Louis-le-Grand) en París, en ese entonces era una institución jesuita, para estudiar retórica y humanidades. Como un noble, fue acompañado por su propio servidor y por un tutor sacerdote, Abbe Deage. Te dejo un video a continuación para mas información acerca de la biografia de San Francisco de Sales.
Para complacer a su padre, tomó lecciones en las actividades caballerescas de montar, bailar y esgrimir, San Francisco de Sales es descrito como inteligente y apuesto, alto también bien formado con ojos azul grisáceo, algo reservado y tranquilo, y un invitado bienvenido en los hogares de la nobleza, entre los que su padre tenía conexiones, San Cayetano también fue hijo de padres nobles y con buenos contactos.
Fue educado en el colegio jesuita de Clermont en París (1580-88) y en Padua (Ver: San antonio de padua milagros de amor), Italia, donde recibió un doctorado en derecho (1591). Después de practicar brevemente derecho, recurrió a la religión y fue ordenado en 1593 en Annecy, ciudad principal de su Saboya natal. Francisco comenzó un intenso trabajo misionero en Chablais, un distrito que se había separado de Saboya y se había convertido en calvinista, pero que había sido recuperado por el duque de Saboya, Charles Emmanuel, un ardiente católico.
Confusión en su vida
En 1584, San Francisco de Sales asistió a una discusión teológica sobre la predestinación, convenciéndolo de su condenación al infierno. Una crisis personal de desesperación resultó.
Esta convicción duró hasta diciembre de 1586. Su gran desesperación lo puso físicamente enfermo e incluso postrado en cama por un tiempo.
En algún momento de finales de diciembre o principios de enero de 1587, con gran dificultad, visitó la antigua parroquia de Saint-Étienne-des-Grès, en París donde rezó la “Memorare” ante una famosa estatua de Nuestra Señora de la Buena Liberación.
Se consagró a la Santísima Virgen María y decidió dedicar su vida a Dios con un voto de castidad. Luego se convirtió en un terciario de la Orden mínima. San Francisco de Sales llego a la conclusión que Dios tenía el bien reservado para él, porque “Dios es amor”, como lo atestigua la Primera Epístola de Juan. Esta fiel devoción al Dios del amor no solo expulsó sus dudas, sino que también influyó en el resto de su vida y en sus enseñanzas.
Su forma de enseñar la espiritualidad católica a menudo se conoce como el Camino del Amor Divino, o la Vida Devota, tomada de un libro que escribió sobre un nombre similar: Introducción a la Vida Devota, Sobre la vida de San Francisco se ha realizado una series de películas sobre la confusión que tuvo durante su vida, observa una de ellas a continuación en el siguiente video.
En 1588 Sales terminó sus estudios en el Collège de Clermont y se matriculó en la Universidad de Padua en Italia, donde estudió leyes y teología. Tomó a Antonio Possevino, un sacerdote de la Compañía de Jesús, (Ver: Cuantos milagros hizo Jesús) como su director espiritual. Allí tomó la decisión de convertirse en sacerdote. En un incidente, montó a caballo, y su espada cayó al suelo y cruzó otra espada, haciendo la señal de la cruz cristiana.
En 1592, de Sales recibió su doctorado en derecho y teología. Hizo una peregrinación a Loreto, Italia, famosa por su Basílica de la Santa Casa (Santuario de la Santa Casa) y luego regresó a su hogar en Saboya. El Senado de Chambéry lo admitió como abogado. Mientras tanto, su padre consiguió varios puestos para Francisco, incluido un nombramiento como senador. Su padre también eligió a una rica heredera noble como su novia.
Pero Francisco se negó a casarse, prefiriendo mantenerse concentrado en su camino elegido. Su padre inicialmente se negó a aceptar que Francisco había elegido el sacerdocio en lugar de cumplir sus expectativas con una carrera político-militar, Santa Catalina También se negó a contraer matrimonio.
Claude de Granier, entonces obispo de Ginebra, intervino y, tras ceder a su hermano menor sus derechos de sucesión familiar, San Francisco de Sales fue ordenado sacerdote en 1593. Inmediatamente recibió un nombramiento prometido como rector del capítulo catedralicio de Ginebra.
Su Vida en el Sacerdocio
En su calidad de preboste, San Francisco de Sales participó en entusiastas campañas de evangelismo en un área que se había vuelto casi completamente calvinista. Según J. Ehni, a pesar del celo, la valentía y la paciencia de San Francisco de Sales se encontró con un fracaso absoluto en Thonon, la capital de la provincia de Chablais, donde los residentes habían llegado a un acuerdo para negarse a escuchar al predicador elocuente.
Al principio San Francisco de Sales vivió en una fortaleza guarnecida por los soldados del duque de Saboya, varias veces escapó a la muerte a manos de asesinos. Viajó a Roma y París, donde forjó alianzas con el Papa Clemente VIII y Enrique IV de Francia.
En 1599 fue nombrado coadjutor obispo de Ginebra. En 1601, fue enviado a una misión diplomática a Enrique IV, donde fue invitado a dar sermones de Cuaresma en la Capilla Real.
La moral en la corte reflejaba las del rey, que eran notoriamente malas, pero Henry se unió personalmente a Francisco. Se dice que observó un pájaro raro, este Monsieur de Genève, es devoto y también culto; devoto y erudito, pero al mismo tiempo un caballero.
Una combinación muy rara, mientras estuvo en París, también conoció al cardenal Berulle y fue, durante un tiempo, el confesor de Madame Acarie. Consultaron con él sobre asuntos como la introducción de Carmelitas de Santa Teresa en Francia y planes para la reforma de monasterios y conventos. Fue consultado en asuntos de conciencia por personas en la corte.
Muerte de San Francisco
En 1622, el duque de Saboya, camino de encontrarse con Luis XIII en Aviñón, invitó al san Francisco de Sale a encontrarse con él en esa ciudad. Movido por el deseo de suplicar a los franceses de sus diócesis, el obispo aceptó la invitación, arriesgando su mala salud en el largo viaje a mediados del invierno.
Parecía que el santo sentía que su vida estaba por terminar. Antes de partir de Annecy, ordenó todos sus asuntos y comenzó el viaje como si no volviera a su rebaño. En Aviñón hizo todo lo posible para continuar su acostumbrada vida de austeridad, pero las multitudes se agolparon para verlo y todas las comunidades religiosas querían que el santo obispo les predicara.
En su viaje de regreso, San Francisco se detuvo en Lyon, quedándose en la pequeña casa del jardinero del Convento de la Visitación. A pesar de que estaba muy cansado, se quedó todo el mes atendiendo a los religiosos. Uno de ellos le preguntó qué virtud en particular debía practicar; el santo escribió en una hoja de papel con letras grandes: “Humildad”.
Durante la temporada de Adviento y Navidad, bajo el invierno riguroso, continuó su viaje, predicando y administrando los sacramentos a todos los que los solicitaban. El día de la fiesta de San Juan Apóstol, se sorprendió por una parálisis, pero recuperó su discurso y su plena conciencia. Con admirable paciencia se sometió a los dolorosos remedios administrados con la intención de prolongar su vida, pero en realidad acortaron su vida.
Su última palabra fue el nombre de “Jesús”. Mientras la gente a su alrededor se arrodillaba para rezar las Letanías por la agonía, San Francisco de Sales expiró dulcemente el 28 de diciembre de 1622 en la Fiesta de los Santos Inocentes. Tenía 56 años y había sido obispo durante 21 años.
Reliquias de San Francisco de Sales
El 29 de diciembre, toda la ciudad de Lyon marchó a través de la humilde casa donde murió el santo querido. Era tanto el deseo de la gente de besar y tocar las manos y los pies de San Francisco de Sales que a los médicos les costaba llevar el cuerpo para la autopsia.
Se dijo que, al quitarle la bilis, se encontraron 33 piedras, símbolo de sus heroicos esfuerzos para vencer su inclinación a la ira y el mal genio, y convertirse en el Santo de la bondad y la dulzura.
toda la gente de Lyon quería guardar algo en memoria del santo; su ropa fue cortada en pequeños pedazos y entregada a la gente como una reliquia, El Corazón de San Francisco de Sales: en una caja de plata, el corazón de este gran obispo fue llevado al Convento de las Hermanas de la Visitación en Lyon y allí fue guardado como un gran tesoro.
Fue Expuesto al público después de embalsamar el cuerpo del obispo Francisco de Sales, se vistió con sus vestimentas episcopales y se lo llevó en el ataúd para su misa fúnebre en la Iglesia de la Visitación Él estuvo expuesto para la veneración de los fieles durante dos días.
Veneración a San Francisco de Sales
San Francisco de Sales ha sido llamado el Santo Caballero por su paciencia y gentileza. A pesar de la resistencia de la población de Lyon para mover sus restos de esa ciudad, Sales fue enterrado el 24 de enero de 1623 en la iglesia del Monasterio de la Visitación en Annecy,
Esta fue fundada por el que junto con Santa Chantal, que también fue enterrada allí. Sus restos fueron venerados allí hasta la Revolución Francesa. Muchos milagros han sido reportados en su santuario.
San Francisco de Sales fue beatificado en 1661 por el Papa Alejandro VII, quien lo canonizó cuatro años después. Fue declarado Doctor de la Iglesia por el Papa Pío IX en 1877.
La Iglesia Católica Romana celebra la fiesta de San Francisco de Sales el 24 de enero, el día de su entierro en Annecy en 1624. Desde el año 1666, cuando su día de fiesta se insertó en el Calendario Romano General, hasta su revisión de 1969, se celebró el 29 de enero, una fecha aún conservada por algunos católicos tradicionalistas.
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En 1923, el Papa Pío XI lo proclamó un favorecedor de escritores y periodistas, porque hizo un uso extensivo de hojas sueltas y libros tanto en dirección espiritual como en sus esfuerzos por convertir a los calvinistas de la región. San Francisco desarrolló un lenguaje de señas para enseñarle a un sordo acerca de Dios. Debido a esto, él es el santo patrón de los sordos.
Obras de San Francisco de Sales
San Francisco de Sale escribió varios libros entre ellos Escribió el clásico devocional Introducción a una vida devota (3ª edición definitiva, 1609), que enfatizaba que la perfección espiritual es posible para personas ocupadas en los asuntos del mundo y no solo, como muchos creían en ese momento, para aquellos que se retiran de la sociedad.
San Francisco de Sales fue el primero en recibir una beatificación solemne en San Pedro, Roma (1661). En 1877 se convirtió en el primer escritor en francés en ser nombrado doctor de la iglesia.
Además de sus obras espirituales, sus escritos incluyen controversias contra los calvinistas, cartas, sermones y documentos sobre la administración diocesana.
Algunas de Sus obras fueron Establezca sus lecturas gratuitas de corazón de De Sales, Conferencias espirituales de los Oblatos de San Francisco de Sales. Un resumen del espíritu interior de las religiosas de la visitación de la Santísima Virgen María (1834), La flora mística de San Francisco de Sales; o, La vida cristiana bajo el emblema de las plantas entre otras.
Legado de San Francisco de Sales
En el siglo XIX, su visión de las comunidades religiosas revivió. Varios institutos religiosos se fundaron durante ese período para hombres y mujeres que deseaban vivir el camino espiritual que Sales había desarrollado a continuación algunas obras de san francisco de sales. Los Misioneros de San Francisco de Sales (M.S.F.S.), fundado por el Abbé Pierre Mermier en 1838, fueron la primera congregación en adoptar su espiritualidad en el siglo XIX.
El instituto religioso de los salesianos de Don Bosco (S.D.B.), fundado por San Juan Bosco en 1859 (aprobado por la Santa Sede en 1874), fue originalmente llamado la Sociedad de San Francisco de Sales, y se colocó bajo su patrocinio.
Las Hermanas Oblatas de San Francisco de Sales (O.S.F.S.) fueron fundadas por St. Léonie Aviat y el Beato Louis Brisson, bajo la guía espiritual de la Venerable María de Sales Chappuis, V.H.M., en 1866.
Los Oblatos de San Francisco de Sales (O.S.F.S.) fueron más tarde fundados por Brisson para hombres, también bajo la guía de la Madre María de Sales, en 1875. [9]
Los Padres Paulistas en los Estados Unidos lo consideran uno de sus patrones, El Instituto de Cristo (Ver: Oración de la sangre de Cristo contra los enemigos) Rey, Sacerdote Soberano, una sociedad de sacerdotes fundada en el siglo XX, también tiene a San Francisco de Sales como uno de sus tres principales Patrones. Uno de los principales apostolados del Instituto en los Estados Unidos es el Oratorio de San Francisco de Sales en St. Louis, Missouri.
Relación entres San Francisco y Don Bosco
Miramos a Jesús para conocer a Dios y cómo Dios está con nosotros, y Jesús nos pidió que aprendamos especialmente que él es “gentil y humilde de corazón.” San Francisco de Sales es aquel que aprendió y vivió el dulce amor de Cristo. de tal manera que aquellos que lo conocieron dirían que, si Jesús apareciera en cualquier momento, lo conocerían porque sería como San Francisco.
Don Bosco vio en San Francisco, que había vivido al otro lado de los Alpes un par de siglos antes, alguien a quien imitar, alguien en quien modelarse para el trabajo de su vida. De hecho, cuando fue ordenado sacerdote, hizo esta resolución: “El amor y la dulzura de San Francisco de Sales me guiarán en todo”.
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Lógicamente, se sintió obligado a decir que cualquiera que quisiera compartir su trabajo para jóvenes debía tener el espíritu de Francisco de Sales. Debían vivir el Evangelio de Jesús como lo hizo Francisco.Para Francisco, Dios era sobre todo el Dios de mi corazón. Él era padre y madre para todos. Dios nos nutre y nos lleva suavemente a un pacto con Jesús, cuyo amor más tierno se demostró cuando murió por nosotros en la Cruz.
La vida diaria es el lugar común para encontrar a Dios. Para San Francisco de Sales, el momento presente era como un octavo sacramento, un lugar sagrado de reunión con Dios. Nada era más seguro que su presencia para nosotros. Tan seguro como que saldrá el sol mañana, así que seguramente estará allí conmigo como lo está hoy.
Si tengo que soportar una gran cruz, escribió San Francisco de Sales, me la quitara o me dará la fuerza para cargarla”. No hay necesidad de ningún miedo, estas frases de San Francisco de Sales fue inspiración para muchos de sus devotos. Nuestra vida, en toda su humanidad, es única y hermosa: el gran regalo de Dios para nosotros. Es nuestro vivir con alegría y optimismo. Realmente estamos en las manos de Dios Podemos encontrar la fuerza interna para enfrentar cualquier vida que nos arroje.
Pero debemos ser realistas hoy y no soñar ociosamente con el mañana. La suavidad y la indulgencia solo traen tristeza. Hay alegría, libertad y paz de corazón que se encuentran donde el amor es genuino y sin compromiso. Es un viaje a Dios que es posible para cualquier persona.
Francisco creía apasionadamente en la bondad radical que se encuentra en cada uno de nosotros: un potencial de bien que es mayor que cualquier tendencia al mal. Este humanismo de Francisco me anima a creer en un florecimiento total de mi vida, tanto natural como sobrenatural. Este es el camino de la ‘santidad salesiana.
No tenía tiempo para una actitud de ‘pesimismo’ ante la vida. “Aliméntate de alegría”, diría. Los predicadores que enseñaban lo contrario eran ‘traidores de la humanidad’.
San Francisco de Sales, como Jeremías, tenía el corazón de un profeta que no podía decir “No” a Dios. Este fuerte celo apostólico, junto con un amor apacible y pastoral, fueron el modelo perfecto para los salesianos de Don Bosco que iban a conquistar los corazones de los jóvenes.
Fuerza que es gentil; dulzura que es fuerte. Solo la bondad puede ganar corazones: bondad que paga el precio de la disponibilidad ilimitada, la paciencia y la abnegación.
Jesús vino a revelar “la bondad amorosa del corazón de nuestro Dios”. Francis y Don Bosco sabían que todo parte de él y todo lo lleva a él. El amor (Ver: Oración a San Marco de León Para el Amor) es el comienzo, el amor es el final, el amor es el camino.
Entonces, cuando fundó su nueva congregación, el nombre que adoptó fue la Sociedad de San Francisco de Sales. Esa es la conexión entre los Salesianos y San Francisco de Sales. Fue después de la muerte de Don Bosco que la sociedad cambió de nombre: salesianos de Don Bosco.
Oración a San Francisco de Sales
Actualmente existe una gran cantidad de oraciones para diversos motivos, es muy popular la oración milagrosa a Santa Elena a continuación la oración Base de San Francisco de Sales, antes de leerla puedes observar este video con otra oración de este Santo.
No mires hacia adelante a las pruebas y cruces de esta vida con temor y miedo. Más bien, míralos con plena confianza que cuando se levanten, Dios, a quien perteneces, te librará de ellos, el te ha guiado y protegido hasta ahora en vida.
¿Te aferras a su querida mano? Y el te guiará con seguridad a través de todas las pruebas. Cuando no puedas pararte, él te llevará cariñosamente en sus brazos. No mires hacia adelante a lo que puede pasar mañana. El mismo Padre Eterno que se preocupa por ti hoy te cuidará bien mañana y cada día de tu vida.
O él te protegerá del sufrimiento o Él te dará la fuerza infalible para soportarlo. Estate en paz y deja de lado todos los pensamientos inútiles, temores vanos, y ansiosas imaginaciones. Amen
Señor, ten piedad de nosotros. cristo, ten piedad de nosotros.
Oh Dios, por cuya gracia el Beato Francisco, tu confesor y obispo, se hizo todo para todos los hombres para la salvación de sus almas, misericordiosamente concédenos que llenos de la dulzura de tu amor.
Podamos, a través de la guía de sus consejos, y con la ayuda de sus méritos, alcanzan las alegrías de la vida eterna. Por Cristo nuestro Señor Amén.
Novena De San Francisco de Sales
Para realizar esta novena es necesario tener mucha Fe, Una buena actitud, ademas tener felicidad en el corazón, si deseas otra opción de una oración de este tipo puedes hacer la novena o rosario a San Patricio.
Ohh bendito Francisco de Sales, quien en la tierra sobresalió en una vida de virtud, especialmente en el amor de Dios y del prójimo, te pregunto fervientemente para llevarme bajo tu compasivo cuidado y protección. Obtener para mí la conversión de la mente y corazón Otorgue a todas las personas, especialmente (nombres de aquellos a quienes desea incluir)
puede experimentar la profundidad de la redención de Dios y el amor curativo Enséñame a fijar mis ojos en las cosas de cielo incluso mientras camino todos los días con mis pies plantado firmemente en la tierra. Ayúdame, a través de la práctica de la virtud y la búsqueda de la devoción, para evitar cualquier cosa que de otra manera hacerme tropezar en mi intento de seguir Cristo y ser un instrumento del Santo Espíritu.
Alentados por sus oraciones y ejemplo, ayúdame a vivir plenamente mi sagrada dignidad con la esperanza de experimentar mi sagrado destino: vida eterna con Dios Recibe también este particular necesidad o preocupación que ahora levanto en oración. (menciona tu necesidad particular).
Oh Dios, por la salvación de todos, deseaste que San Francisco de Sales-predicador, misionero, confesor, obispo y fundador debería hacerse amigo de muchos en el camino de la salvación. Misericordiosamente, concedamos que nosotros, infundidos con la humildad y la gentileza de su caridad, guiado por su sabiduría y compartir en su espíritu puede experimentar la vida eterna. Preguntamos esto por Cristo nuestro Señor Amén.
