En estos tiempos en donde se habla d guerras y de discordias en muchos países es bueno textos biblicos que hablen de la paz para que disminuyan esas contiendas y se llegue a la reconciliación y a la paz en el mundo.
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Aprendamos textos biblicos que hablen de la paz
Muchas veces hemos escuchado que existe una paz que no pertenece a este mundo.
Pero ¿Cómo podemos lograr saber cuál es o cómo reconocerla? Y luego de haberla encontrado,
¿cómo puedo impedir que se aleje o perderla?
Hoy vamos a tener en consideración todas estas interrogantes en este artículo.
Exploremos la primera pregunta a ver que encontramos
¿Cómo se consigue distinguir la paz que proviene de parte de Dios?
La paz de Dios se descubre al inicio sólo por una forma: a partir de toda perspectiva es un conocimiento
absolutamente distinto de cualquier experiencia que hayas sentido anteriormente.
No existe nada que hayas experimentado antes que te acerque a esto. No rememora nada que se pueda
relacionar con tu pasado. Es señal íntegramente única y nueva.
Existe indubitablemente una oposición entre y cualquier acción del pasado. Pero fisgonamente, no es
éste un discrepancia que esté asentado en incompatibilidades serias.
El pasado simplemente se disipa, y la tranquilidad imperecedera viene a conquistar su lugar.
En este artículo encontrarás algunos frases biblicas para jovenes, que te ayudarán a edificarte.
Cuando encontremos textos biblicos que hablen de la paz, podrás entender lo que te hablo.
Eso es simplemente todo. La diferencia que se había descubierto al umbral llanamente se esfuma.
La tranquilidad se ha desarrollado para envolverlo todo.
¿Cómo se encuentra esta quietud?
Ninguno que escarbe exclusivamente sus circunstancias puede renunciar a hallarla.
La paz de Dios no consigue hacer acto de manifestación allí donde hay furia, pues la furia entorpece
inexcusablemente la coexistencia de la paz.
Aquellos que de alguna forma o ante cualquier acontecimiento piense que la furia está argumentada
y promulga que la paz es un disparate, no logrará por menos que profesar que no está.
En esas circunstancias no se consigue encontrar la paz de Dios. Es entonces el perdón, el requisito
indefectible para encontrarla.
Y si hay algo definitivo es que donde existe el perdón indudablemente debe imperar la paz. Puesto
¿qué otra elemento sino la agresión lleva a la guerra? ¿Y no existe en este mundo aparte de la paz
que sea lo contrario a una situación de guerra?
Aquí la discrepancia primera sobresale de una forma bastante notoria e indudable. Cuando logramos
encontrar la paz, sin embargo, la guerra desiste de poseer sentido alguno. Y actualmente es el problema
el que se descubre como ilusorio e inexistente.
Encuentra textos bíblicos que hablen del matrimonio entrando en el enlace podrás encontrarlos.
Y para eso nos sirven los textos biblicos que hablen de la paz, para poder reforzar todo lo que
estamos aprendiendo aquí, para ponerlo por obra.
¿Cómo podemos perseverar en poseer la paz de Dios luego de haberla hallado?
Si la ira regresa, en la manera que sea, el fastidioso cortinón retornará a abatir una vez más y la fe de
que no es viable que haya paz irremediablemente volverá.
La beligerancia se restablecerá una vez más como la impar situación.
Y entonces tendrás que remover tu espada de nuevo, no obstante no te hayas fijado de que la tenías ya
blandida.
Pero al evocar, si bien sólo sea remotamente, la manera en que feliz eras sin ella, te suministrarás de
entendimiento de que tuviste que haberla vuelto a blandir para protegerte.
Es aquí donde nos damos cuenta que al permitir que la ira regrese a nosotros, perderemos indudablemente
la paz de Dios, dejamos de lado automáticamente la ira, las molestias o contiendas para volver a nuestra
situación pasada en donde todo estaba bien.
Retente en ese momento y cavila en lo sucesivo: ¿escoges la batalla o sería la paz de Dios una elección superior?
Una percepción despejada no es una dádiva trivial. ¿Cuál te contribuye más? ¿No es preferente vivir a preferir la morir?
Un tema que puede interesarte es conocer quien es moises el profeta, lo sabrás cuando entres al enlace.
Estos son algunos textos biblicos que hablen de la paz:
Números 6:24-26; Mateo 5:9; Juan 16:33; 1 Pedro 3:10-11; Juan 14:27; Colosenses 3:13;
Salmos 4:8; Santiago 3:18; Colosenses 3:15;Efesios 4:3; Isaías 26:3; Proverbios 16:32;
Hebreos 12:14; Judas 1:2; Santiago 3:17; Salmos 34:14; Hebreos 12:11; Isaías 52:7;
Filipenses 4:9; Proverbios 20:3; Romanos 8:6; Salmos 119:165; Salmos 46:10; Romanos 5:1; Lucas 2:14.
Pero lo que no visualizas es que tú mismo concebiste la muerte, la cual es solo la ilusión
de un finito. La muerte no consigue ser un escape ya que el inconveniente no reside en la vida.
La vida no tiene inverso, pues la vida simplemente es Dios. La vida considera ser lo contradictorio a la muerte
puesto que tú has resuelto que la muerte acaba con la vida.
Absuelve al mundo y percibirás que nada de lo que Dios creó puede poseer conclusión, y que nada de lo que
Él no haya establecido es existente.
Con esta expresión se extracta nuestro itinerario. Con esta oración se le proporciona a nuestras prácticas el
impar propósito que poseen. Con este pensamiento se cuenta el esquema de saberes del Espíritu Santo
puntualmente como es.
¿Qué significa tener la paz de Dios?
La paz de Dios no es otra cosa que esto:
Es el estricto hecho de aceptar que Su Voluntad no posee ningún adversario. No existe corriente que
objete Su Voluntad es verdadera. La divergencia entre Su Voluntad y la tuya solamente
proporcionaba el vestigio de ser existente.
Tener paz representa en nosotros poder aceptar su voluntad en nuestra vida y que es buena y perfecta
para cada uno de nosotros.
Ahora que posees algunos textos biblicos que hablen de la paz, podrás encontrarla, seguirla y no soltarla jamás.