Santo Tomás de Aquino nació cerca de Aquino, Italia. Es conocido como el Doctor Angélico. Fue un teólogo y filósofo católico que llego a la santidad y hoy en día es venerado por la iglesia católica por todos los aportes y milagros que se le atribuyen.
Biografía y vida de Santo Tomás de Aquino
Santo Tomás de Aquino nació en el 1225 en un castillo en una montaña de Roccasecca, muy cerca de la ciudad de Aquino, en el Reino de Nápoles, Italia. Sus padres fueron Landolfo y Teodora, tenía once hermanos, siendo el él menor de los varones. La familia de su padre era de origen lombardo y sus ascendientes eran los condes de Aquino. Los condes de Taete y Chieti eran los padres de la señora Teodora, por lo cual Tomás formaba parte de una familia aristocrática, de las más influyentes de Italia.
Además Tomás era familia del emperador Federico II, por lo que pertenecía a una familia muy numerosa de la nobleza y con sangre germana. A los cuatro años comenzó sus estudios en el monasterio benedictino de Montecassino, cerca del castillo donde nació en donde ingreso para recibir una buena instrucción, ya que su padre quería que siguiera la carrera eclesiástica. Allí aprendió los conocimientos básicos de latín, moral, gramática, música y religión.
Tomás era un hombre muy amable y de buenos sentimientos. Tenía un porte muy distinguido, era alto, de contextura gruesa y frente despejada. Lo que más lo caracterizo fue su devoción a Dios y la Virgen María.
En el año 1239 el emperador Federico II ordenó la expulsión de los monjes del monasterio, para que fuera ocupado por sus tropas, convirtiendo a Montecassino en un campo de batalla. Es por eso que a sus catorce años Tomás salió de ese convento en donde los monjes le enseñaron además de los conocimientos académicos, a meditar en silencio. Esto hizo que cada vez que leía o estudiaba algo, tenía la capacidad de aprenderlo de memoria, con una facilidad impresionante.
A finales del mismo año comenzó sus estudios de arte y teología en la Universidad de Nápoles, en donde superaba en inteligencia y memoria a todos sus compañeros. Permaneció allí durante cinco años, hasta culminar sus estudios. En ese momento fue cuando conoció sobre Aristóteles, lo cual llamo mucho su atención, profundizándose en sus pensamientos.
Durante sus estudio Tomás también conoció a algunos monjes, uno de ellos Juan de San Giuliano, pertenecientes a la comunidad de los padres dominicos. Se sintió completamente atraído por la vida que estos llevaban, naciendo a sus veinte años su vocación dominica. Fue entonces que en el año 1244, después de la muerte de su padre, Tomás ingreso como novicio a la Orden de los Predicadores dominicos.
Para esta orden el estudio tenía un papel fundamental; el objetivo final de los frailes dominicos era conseguir, por medio de la predicación la salvación de las almas a través del conocimiento de Jesucristo (Ver: quien es jesucristo para los católicos de la nueva era). Es por eso que el estudio constituía un elemento esencial de la vida religiosa, siendo para ellos una obligación.
Su familia se opuso rotundamente a esa decisión de Tomás, no estaban de acuerdo con que ingresara a ese lugar. Además la Orden de predicadores que había sido fundada por Santo Domingo de Guzmán (1170-1221) apenas 24 años atrás contaba aún con poco prestigio e influencia, lo cual a su familia no le gustaba.
Por tal razón la familia de Tomás lo obligo a irse para el castillo familiar de Montesangiovanni, donde tuvo que permanecer durante casi dos años. Algunas personas dicen que huyo para Alemania, su madre consiguió que su hermano el emperador Federico II permitiera que dos de los hermanos de Tomás quienes pertenecían a su ejército lo apresaran. Por tal razón lo encontraron sus hermanos en conjunto con un escuadrón de militares, quienes lo pusieron preso.
Lo que sí es un hecho es que Tomás permaneció encerrado durante casi dos años, los cuales no lograron quitarle el hábito de dominico. Todo lo contrario, durante todo ese tiempo se aprendió muchas de las frases de la santa biblia; además estudio muy a fondo el mejor tratado de teología que había para ese momento.
Al su familia ver que no podían quitarle a Tomás la idea de ser religioso sus hermanos decidieron llevar a él la tentación para que así abandonara su vocación religiosa; le enviaron a una mujer de la mala vida para que lo hiciera pecar. Tomás agarra en sus manos un tizón encendido y se lanza contra la mala mujer, amenazándola con quemarle el rostro si se atreve a acercársele.
La mujer salió huyendo del cuarto y así Tomás logro vencer ese primer obstáculo en su camino. Pudo superar y vencer las pasiones de la carne, así fue como la Iglesia Católica logro conseguir un gran santo. Si este joven no hubiera sabido vencer la tentación y la impureza, no tendríamos hoy a este gran Doctor de la Iglesia. Esa noche durante sus sueños Tomás vio una luz blanca, una visión celestial que venía a felicitarlo, y le llevo una banda blanca en señal de virtud, de la pureza que le concedía Nuestro Señor.
Juan el Teutónico, general de los dominicos presento una queja al emperador Federico II por el encierro de Tomás. Por lo cual el emperador accedió, ordenando que fuera dejado en libertad. Fue así como después de casi dos años pudo salir del castillo del que era prisionero solo por querer seguir los caminos de Dios.
Después de ser liberado en el año 1244 toma el hábito de la Orden de Predicadores y en 1245 es enviado a Paris por sus superiores, donde culmino el noviciado que ya había comenzado en Nápoles y siguió con sus estudios filosóficos y científicos en la Universidad de Paris y los de teología en el convento dominico de Saint Jacques. Donde estudio bajo el magisterio de San Alberto, el Magno.
Fue allí en donde sus dotes de humildad hicieron que al principio su gran inteligencia y saber pasasen desapercibidos. Sus compañeros de clases comenzaron a llamarlo el buey mudo, por la contextura gruesa de su cuerpo y por ser un muchacho tímido y callado. Alberto Magno al enterarse del sobrenombre que le tenían a Tomás le dijo a los compañeros “Ustedes lo llaman el buey mudo. Pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero”, y es efecto eso fue lo que sucedió.
Sus compañeros decían que la ciencia de Tomás era muy grande, pero que su piedad era más grande todavía. Pues pasaba horas y horas rezando, sobre todo las oración padre nuestro avemaría y gloria características de los católicos; celebraba mucho ir a las misas y su rostro resplandina durante la eucaristía. Se emocionada cuando hablaban sobre a la vida y la resurrección de Dios.
Santo Tomás de Aquino acompaña a Alberto Magno a un viaje al que lo mandaron en junio del año 1248 a Colonia, Alemania a donde fue enviado como profesor. Durante ese tiempo Tomás participo como lector de la Sagrada Escritura y era el discípulo de Alberto Magno, quien le abre las puertas y enseña sobre la tradición teológica occidental. Lo pone en contacto con la obra aristotélica y además lo estimula en su empeño de atender a la experiencia y a conocer la naturaleza.
Entre Santo Tomás de Aquino y San Alberto se entablo una duradera amistad, durante el tiempo que pasaron juntos, además los unía el hecho de ambos pertenecer a la unión dominica. Alberto Magno era un filósofo alemán que tenía gran interés en la vida y obra de Aristóteles. Era autor de uno de los escritos en el que simplificaba la obra de Aristóteles, esto fue lo que fortaleció mas el interés de Tomás por todo lo relacionado con este antiguo filósofo griego.
En el año 1252 el general de la orden de predicadores Juan el Teutónico, se comunicó con Alberto Magno porque necesitaba a un dominico para un puesto en la cátedra de Teología de extranjeros de la Universidad de París, por lo que le pidió que le recomendara a alguno de sus discípulos con la finalidad de que ocupara dicho puesto. Sin duda alguna Alberto recomendó a Tomás, quien fue nombrado profesor bachiller sentenciario en la reconocida Universidad.
En ese mismo año volvió a Paris donde termino sus estudios y comenzó a dar clases en la prestigiosa Universidad de Paris con tan solo 27 años de edad. Donde tras doctorarse se desempeño como profesor, en la catedra que estaba destinada a los dominicanos, en la facultad de teología. Este nombramiento represento el principio de su vida pública, ya que su enseñanza rápidamente llamó la atención tanto de profesores como de alumnos.
Al llegar a la Universidad de Paris, en la cual fue profesor durante cuatro años, esta se encontraba en medio de un conflicto entre los educadores; muchos de ellos exigían que los monjes abandonaran las asignaturas a las que impartían sus clases. Lo cual desemboco un enfrentamiento entre los profesores seculares y los regulares.
El principal opositor a los monjes era Guillermo de Saint Amour, quien fue respondido por el franciscano San Buenaventura en su libro La perfección evangélica. Y más adelante por Santo Tomás de Aquino en su obra Contra los que impugnan el culto divino y la religión, cuando ya era maestro teólogo en abril de 1256, en la cual defendía el derecho de los religiosos a impartir sus enseñanzas y pertenecer al claustro de maestros de una Universidad.
La disputa era tal que el Rey Luis IX tuvo que intervenir para proteger con sus guardias al convento de los dominicos de posibles ataques. En principio Tomás no lo tuvo fácil, había que defender la legitimidad de la presencia de los frailes mendicantes como maestros en la Universidad. Había quienes exigían renuncia al prestigio y a la influencia del saber teológico y filosófico a aquellos que habían hecho profesión de pobreza evangélica.
Para los franciscanos ya había sido difícil en otras ocasiones el tema de los estudios y las ciencias sagradas, debido a su vocación originaria. Para los predicadores dominicos en ese entonces tenía un aspecto distinto. Ya en ese momento existía la fundación Santo Domingo, la cual había sido creada en honor a Santo Domingo Savio, patrono de los estudiantes.
Dicha fundación había sido creada para la orden de predicadores y doctores. Ya que su vocación en la sociedad cristiana exigía el cultivo y enseñanza de las ciencias sagradas y todas las disciplinas humanas.
Los problemas eran tales que fue necesaria la intervención de los pontificios romanos, para asegurar el derecho de los frailes en París a impartir sus conocimientos de las cátedras religiosas. El conflicto finaliza en octubre de 1256 cuando Alejandro IV condeno la obra de Guillermo Saint Amour (Sobre los peligros de los novísimos tiempos) y lo desterró de la ciudad de Paris.
Fue así como Santo Tomás de Aquino y San Buenaventura pudieron incorporarse al claustro de la Universidad, aunque ellos ya impartían sus clases desde hace tiempo, enseñando sus cátedras.
Tomás fue ordenado sacerdote y nombrado magister. Sus clases de la Universidad se basan en principio en explicar las sentencias de Pedro Lombardo, y dar sus opiniones relacionadas con esa obra de la teología. Todo este tema le dio a Tomás mucho material y una base general para realizar posteriormente su obra magna, la “Summa Theologica”.
El Rey San Luis le tenía un gran aprecio a Santo Tomás de Aquino, le pedía sus consejos en cualquier asunto de gran importancia, confiaba en sus decisiones plenamente. Durante los años de conflicto había preparado su obra “Escritos” que constituía una síntesis sobre los cuatro libros de la sentencia de Pedro Lombardo, del cual además de tener amplios conocimientos impartía sus clases.
Francisco de Zurbaran. Apoteosis de Santo Tomas. Museo de Bellas Artes de Sevilla
Luego de obtener su doctorado y comenzar a impartir sus cátedras en la Universidad, Tomás dio inicio a la creación de sus primeras obras. Con ellas comenzó a alejarse de la corriente teológica mayoritaria, derivadas de las enseñanzas de San Agustín o San Agustín de Hipona.
Tambre realizo otra obras tales como: “Sobre el ente y la esencia” entre 1250 y 1256, la cual era lo esencial de la teoría tomista sobre la metafísica. En el año 1255 realizo “Sobre los principios de la naturaleza” y “Sobre la naturaleza de la materia y las dimensiones indeterminadas” cuya investigación comenzó en el año 1252 y culminó en el año 1256.
Además creo el libro “Cuestiones disputadas sobre la verdad” al cual le dio inicio en el año 1256 y termino alrededor del año 1259. En este texto expresa su teoría relacionada con el conocimiento y referente la conciencia existencial del ser.
Posteriormente el dominico catalán Raimundo de Peñafort le pidió que realizara una obra que sirviera como guía de referencia a los monjes dominicos que se encontraban con los musulmanes, lo cual le llevo a comenzar a escribir la “Suma contra los gentiles”. En el año 1259 el Sumo Pontífice le solicita a Tomás que se fuera a Italia, regreso a Nápoles con su amigo y secretario Reginaldo de Piperno quien estuvo con él hasta su muerte.
Fue en calidad profesor y recorrió el país predicando y enseñando en muchas ciudades. El papa lo nombró como consejero teológico, además era el autor de himnos famosos y sus melodías por lo cual estuvo al servicio de la corte pontificia en calidad de instructor y consultor del Papa, a quien acompañaba en sus viajes.
Además fue nombrado Predicador Provincial y fue el encargado de dirigir el colegio Pontificio de Roma. En el año 1261como predicador general a un capítulo de la Orden de la provincia romana el cual se celebró en Orvieto, y fue al primero que se presentó un lector del convento dominico. A raíz de eso entablo una gran amistad con el papa Urbano IV.
En el año 1264 Santo Tomás de Aquino fue al convento de Santo Domingo de Nápoles en donde termino con su obra “Suma contra los gentiles” la cual ya había iniciado en la ciudad de Paris. Fue un hombre muy popular en toda Italia, país que le enseño muchas cosas y donde se encargó de predicar en diversas ciudades.
Los cuatro años que Tomás paso en la ciudad de Orvieto le sirvieron de mucho para escribir sus obras, además de las que ya han sido mencionadas redactó varios comentarios al Pseudo- Dionisio y a Aristóteles.
El papa Urbano IV le ofreció ser arzobispo de Nápoles, puesto que Santo Tomás de Aquino rechazo. Con esa decisión hizo desechar las ambiciones de su familia de verlo convertido de algún día verlo convertido en Papa.
En el año 1265 le fue encargada la apertura de un estudio provincial en Roma, el cual fue elegido como convento de Santa Sabina, en el cual había vivido Santo Domingo.
Luego para el año 1266 comenzó a escribir la “Suma Teológica” la cual fue una de sus más importantes y famosas obras. Tenía 14 tomos y se basó en la Sagrada Escritura, la filosofía y la teología que se convirtió en la doctrina de los santos, donde da a conocer sus enseñanzas católicas. Esta obra es uno de los textos más profundos que se han escrito de la iglesia católica.
El Romano pontífice le encargo a Santo Tomás de Aquino y San Buenaventura que escribieran los himnos para la fiesta del Cuerpo y Sangre de Cristo y varios cantos para la eucaristía. Cinco de los himnos de Santo Tomas de Aquino eran en honor a Jesús en el Santísimo Sacramento.
Estando en Roma recibió una llamada para que volviera a Francia debido a que se estaban presentando conflictos en la Universidad por lo que se denominó el Averroísmo Latino y Aristotelismo Heterodoxo. Por tal razón Tomás volvió a Paris en el año 1268 a ocupar la catedra por segunda vez. Además se dedicó a defender las ordenes mendicantes y contra los averroístas.
Cabe destacar que la doctrina presentada por Averroes quien fue un pensador musulmán, estaban basadas en la filosofía de Aristóteles y ponía en peligro la teoría escolástica, científica y teológica que había sido desarrollada durante siglos.
São Tomás de Aquino
En su doctrina establecía que el saber estaba por encima de la religión y además negaba la inmortalidad del alma. Tomas seguro de que había hecho una mala interpretación de los pensamientos de Aristóteles se enfrentó a su tesis Sobre la unidad del entendimiento contra los averroístas (1270) y estableció una relación armónica entre fe y razón.
En el año 1272 Santo Tomás de Aquino regreso nuevamente a Italia, a la ciudad de Nápoles, en donde impartió sus últimas enseñanzas. Continuo escribiendo mientras que trabajaba dando su catedra en el mismo lugar donde había comenzado sus estudios. Entre sus alumnos se encontraba Guillermo de Tocco, quien posteriormente fue el autor de su primera biografía y promotor de su proceso de canonización.
Inicio la tercera parte de su obra “Suma” la cual dedico a Jesucristo pero nunca la culmino. Fue Reginaldo de Piperno quien termino con este escrito y hoy en dia se conoce con el nombre de “Suplemento”.
El 6 de diciembre del año 1273 Tomás dejo de escribir. Esto se debió a que tuvo una visión mística la cual le impidió seguir escribiendo y dictando. Mientras se encontraba en una misa vivió una revelación divina de la misma esencia de Dios. Lo único que dijo sobre eso fue a el Hermano Reginaldo quien le pregunto porque había dejado de escribir a lo que Tomás le respondió que comparado con lo que había visto en aquella visión, lo que he escrito es muy poca cosa.
Esta visión solo había sido escuchaba en el mundo católico por Moisés y San Pablo Apóstol, convirtiéndose Santo Tomás de Aquino en el tercero en tener una de estas visiones. Después de esa experiencia no pudo volver a escribir, dirigiéndose con sus palabras habituales sobre el conocimiento de Dios. Santo Tomás de Aquino ha sido el profesor de filosofía más reconocido que ha tenido la iglesia católica.
Poco tiempo después sobrevino su muerte. Santo Tomás de Aquino fue enviado por el Sumo Pontífice Gregorio X al II Concilio de Lyon; pero durante el camino se sintió muy mal, se dice que ya llevaba poco tiempo con una enfermedad. Fue llevado a la abadía cisterciense de Fossa Nuova en donde murió el 7 de marzo de 1274 a sus 49 años.
En principio los monjes de la Fossa Nouva querían quedarse con los restos del santo, pero no lo lograron. Por órdenes del papa Urbano V tenían que ser entregados a sus hermanos dominicos; por lo cual el 28 de enero del año 1369 fueron llevados solemnemente a la Iglesia Dominica. En el año 1628 esta iglesia fue derrivada, por lo que sus restos fueron trasladados a la Iglesia de San Sernin.
Existen numerosos milagros que demuestran la santidad de Santo Tomás de Aquino, por tal razón el 28 de julio de 1323, apenas a 50 años de su muerte fue canonizado por el papa Juan XXII. Posteriormente, en el año 1567 el papa San Pío V lo proclamo Doctor de la Iglesia.
Este santo fue un gran devoto de la Virgen María, siempre le dirigía muchas de sus oraciones; de tal manera que a la orilla de sus libretas escribía “Dios te salve María”. Además de eso Tomás compuso un tratado referente a la Oración Ave María.
León XIII quien era muy conocedor de la vida y obra de este reconocido santo, lo designo como “Príncipe y Maestro de todos los doctores escolásticos” a los cuatro días del mes de agosto de 1879. Igualmente ese día pero un año después fue elegido patrón de todas las universidades, academias y escuelas católicas de todo el mundo, por el mismo pontífice.
Tomás fue un teólogo que se enfocó mucho en el pensamiento aristotélico. Adopto una visión muy similar a la de Aristóteles, por lo cual muchas de sus obras se basaron en eso. Entre ellas una descripción que realizo sobre el pensamiento de este filósofo griego, relacionado con el conocimiento. Y otra en la cual hace referencia a la obra llamada Metafísica de Aristóteles, dando una gran explicación sobre la misma.
Estas obras de Tomás tuvieron como resultado un gran impulso del aristotelismo; lo cual más adelante origino la corriente que se conoce como el Renacimiento. Se puede decir que sus escritos trataron de hacer que se reconciliaran la fe y la razón.
Sin lugar a dudas Santo Tomás de Aquino fue un filósofo, sacerdote y teólogo muy influyente y reconocido por la iglesia católica. Es conocido como Doctor Angélico. Sus obras sobre Dios, la religión y sus interpretaciones y opiniones sobre los pensamientos de Aristóteles representaron un antes y un después en la historia de la religión católica. Y hasta el día de hoy sigue teniendo gran influencia en todo el mundo, además de ser conocido por sus grandes milagros.
Frases de Santo Tomás de Aquino
Como se ha visto hasta el momento Santo Tomás de Aquino fue un hombre muy celebre y culto que mediante sus obras dio a conocer muchos aspectos importantes de la vida y de Dios. Es por eso que son muchas sus frases célebres y palabras savias se han vuelto muy reconocidas en todo el mundo y han trascendido a través del tiempo.
- “El bien puede existir sin el mal, pero no puede haber mal sin que exista el bien”. Hace referencia a que puede haber bien sin la existencia del mal, pero el mal siempre tendrá algo de bien.
- “La fe es aquello que no podemos ver, mientras que la esperanza son las cosas que no se encuentran a nuestro alcance”.
- “La justicia sin que haya misericordia se llama crueldad”. Con esta frase se refiere a que en la justicia también debe influir la misericordia y perdón; de lo contrario constituye un acto de crueldad.
- “La justicia es simplemente la perpetua voluntad de dar a cada quien lo suyo”. Esta es una pequeña definición de Santo Tomás de Aquino, la cual es una de las más influyentes y utilizadas actualmente en el ámbito jurídico.
- “La ley debe ir de la mano con el bien común, ya que su finalidad es el cuidado y protección de una comunidad”. Con esto Santo Tomás de Aquino hace referencia a que las leyes deben ser creadas para proteger y cuidar, por lo tanto deben garantizarle el bien común a la sociedad.
- “El ser humano tiene la libertad de elegir, por el hecho de ser racional”. Esto quiere decir que en la medida en que una persona sea racional tiene la libertad de poder elegir todo en su vida.
- “Cada hombre tiene que forjar y seguir su camino”.
- “Traten a los demás como desees que los demás los traten a vosotros”. Santo Tomás de Aquino nos da a entender que lo que das será lo mismo que vas a recibir. En la medida en que trates bien a las demás personas ellos lo harán también contigo.
- “El alma del ser humano se conoce por los actos que este realiza”. Se refiere a que los actos que realiza una persona son los que van a dar a entender y demostrar cómo está su alma y su espíritu.
- “Para quien tiene fe no es necesaria ninguna explicación, mientras que para quien no tiene fe ninguna explicación es posible”. Tomás con esta frase nos hace entender que cuando alguien tiene fe no necesita de pruebas para crees; sin embargo aquellos que no tienen fe, así tengas pruebas no lo creerán posible. San Agustín y su filosofía estaba de acuerdo con este pensamiento de Santo Tomás.
- “El estudioso es aquel que enseña y guía a los demás a la verdad que él ya ha entendido”.
- “En lo que se encuentra en las Sagradas Escrituras no puede haber falsedad alguna”.
- En la vida siempre será mejor amar a Dios que conocer de él.
- “La educación es el único instrumento que tiene el ser humano para perfeccionarse y vivir dignamente a través de sus conocimientos”
- “Jesús representa en Dios pero en el ámbito del ser humano”. Santo Tomás de Aquino consideraba que Jesús emanaba de Dios y representaba su imagen si fuera un ser humano.
Estos son solo algunos de los pensamientos de Santo Tomás de Aquino a lo largo de su vida y que reflejo en sus obras. Sin duda alguna fue un hombre muy culto e inteligente que supo llegar a comprender algunas de las muchas interrogantes sobre Dios y el ser humano.
Obras de Santo Tomás de Aquino
La recopilación de obras de Santo Tomás de Aquino es muy numerosa, como hemos visto fue uno de los autores más relevantes de la Edad Media. Sus aportaciones fueron de gran significado para la iglesia católica; además son muy importantes en el ámbito de la filosofía y la teología. Es el autor del que más trabajos se conservan en la actualidad.
Sus obras pueden ser clasificadas en cinco tipos: Comentarios filosóficos o teológicos (son las opiniones de Santo Tomás de Aquino sobre las obras de Aristóteles y otros autores), Comentarios bíblicos (los cuales son basados en la Santa Biblia y sus conocimientos sobre Dios y la iglesia católica), Cuestiones disputadas, Opúsculos sobre temas diversos; y por ultimo las Sumas. Las explicaremos de forma cronológica:
De ente et essentia
Sobre el ente y la esencia Tomás escribió esta obra estando en Paris, antes de ser profesor de teología. Es un pequeño trata que se refiere a la noción de la esencia y sus relaciones con la realidad. Se convirtió en una pequeña obra fundamental para conocer las teorías de Santo Tomás de Aquino.
Summa Contra Gentiles
Es la segunda gran obra de Santo Tomás de Aquino. Este escrito lo comenzó cuando fue por primera vez a Paris, entre el año 1252 y 1259. La redacción consta de cuatro libros; el libro primero de 53 capítulos, los cuales se remontan antes del año 1259. Cuando llego a Italia, a partir del año 1260 reviso el libro primero y redacto los demás.
Los primeros tres libros tratan sobre las verdades de la razón humano, haciendo una recopilación de sus conocimientos e investigaciones. El Libro I se refiere a lo que la razón puede conocer de Dios. El libro II sobre el acto de la creación y sus efectos. El Libro III es una explicación sobre el gobierno divino. Por último el Libro IV desarrolla las verdades sobre la fe, hace referencia a la encarnación y los sacramentos, sobrepasando los límites del conocimiento.
Summa Theologiae
Summa TheologiaeConstituye la obra principal de Santo Tomás de Aquino, su más importante redacción. Trabajo en ella los últimos cinco años de su vida. Era considerada como un manual de la doctrina de Cristo para los estudiantes (Ver: cual es la doctrina de cristo segun las sagradas escrituras). Hace una recopilación sobre la teología y la filosofía cristiana. Contiene treinta y ocho tratados, seiscientas doce cuestiones, las cuales están divididas en tres mil ciento veinte artículos.
Esta obra consta de varios criterios, científico, teológico y filosófico; en principio comienza haciendo una reseña sobre las dificultades que tuvieron que pasar los estudiantes de la doctrina católica en sus tiempos. Por tal razón recomendaba esa doctrina como guía para los nuevos alumnos, lo cual facilitaría mucho más sus estudios.
Tomás de Aquino sostenía que el objeto principal de la teología es el estudio de dios, y explico las razones que tiene la teología para demostrar la fe. Esta disciplina busca que se reconozca a Dios como el principio y el fin de todo. Fue el resultado de toda una vida de estudios. Sin duda alguna esta es la obra de Santo Tomás de Aquino que más ha influido en la religión, debido a la cantidad de preceptos y enseñanzas que reflejo sobre la teología.
Officium de festo Corporis Christi ad mandatum Urbani Papae
Un oficio promulgado por Urbano IV fue lo que ratifico que esta obra pertenecía a Santo Tomás de Aquino, ya que algunas personas dudaban de su autoría. Este escrito constituye una doctrina que se encuentra escrita con palabras muy celebres y bonitas para ser dirigidas a Dios en la iglesia. Además incluye palabras del Nuevo Testamento que afirman la presencia real de Cristo en el Santísimo Sacramento junto a textos del Antiguo Testamento.
Esta obra incluye himnos, oraciones y otras palabras que demuestran el conocimiento que tenía Tomás con respecto a la eucaristía. Además contiene una serie de escritos que al unirse forman un comentario al evangelio.
Estas son solo algunas de las numerosas y extensas obras que realizo Santo Tomás de Aquino a lo largo de su vida. Las cuales representan un gran avance en el campo científico filosófico y teológico que se tenía para la época. Además sus obras sirvieron de base para muchos otros relatos doctrinario que se conocen hoy en día.
Aportaciones de Santo Tomás de Aquino
Santo Tomás de Aquino dedico la mayor parte de su vida a los estudios; gracias a eso hizo grandes aportaciones al mundo de la filosofía, teología, psicología, economía, pedagogía, metafísica, entre muchas otras, abarcando la mayor parte de las áreas del conocimiento. Entre algunos de sus aportes se encuentran los siguientes:
Santo Tomás de Aquino y la Filosofía
Desde el punto de vista filosófico Tomás se caracterizó por tener un pensamiento aristotélico. Muchas de sus obras se basaron en comentarios y opiniones relacionadas con los escritos y pensamientos de Aristóteles. Tomo sus análisis como punto de partida para establecer sus conocimientos y su ideología.
Santo Tomás de Aquino partió desde los análisis de Aristóteles; perfecciono los conocimientos que había reflejado en sus obras. Sus escritos sirvieron mucho para entender aún mejor la filosofía de aristotélica. Transmitió a sus lectores una percepción completamente distinta y mejorada; principalmente sobre la composición de los cuerpos, la materia y forma. El llamado doctor angélico estableció cinco vías para demostrar la existencia de Dios.
En contrario a lo que pensaba San Anselmo, que consideraba que la existencia de Dios podría comprobarse mediante un análisis de su concepto, Tomás sostenía que la existencia de Dios se demostraba a través de la experiencia y el razonamiento de su causa. El pensamiento filosófico de Tomás de Aquino daba a entender que los objetos, la materia y todo lo que se encuentra en el universo tiene una esencia. Pero lo que hace que tengan esa esencia, que puedan existir y verse físicamente es la creación y obra de Dios.
Santo Tomás de Aquino y la Psicología
La lectura de las obras de Santo Tomás de Aquino permitió deducir los aportes que realizo al área de la psicología; hace énfasis en el libre albedrío. Establece la existencia de una solo alma en el ser humano que incluye todas sus funciones. Existe una relación natura entre el cuerpo y el alma, la cual se encuentra encerrada en él. Para Aristóteles es imposible que existan de forma separada.
Santo Tomás de Aquino considera que el alma del ser humano es inmortal, y no pertenece al mundo natural que conocemos. Por lo tanto no se encuentra sujeta a ninguna ley natural. Además establece tres funciones del alma, la vegetativa, la sensitiva y la racional.
Santo Tomás de Aquino y la teología
La teología fue el área en la que Tomás de Aquino hizo la gran cantidad de sus aportes, esto se debe a que era su principal vocación y objeto de estudio. Desarrollo la teoría de quien era Dios y de allí fue indagando para conocer su naturaleza.
Para los antiguos filósofos todo lo que se encuentra en el universo está compuesto por materia y formas. Para Santo Tomás de Aquino Dios no es materia, no tiene ni cuerpo ni formas, es decir, no está compuesto por partes. En muchas de sus obras establece lo difícil que es saber con certeza el origen y la naturaleza de Dios; por lo tanto quien alegue saber sobre eso debe comprobarlo.
De acuerdo con su pensamiento Dios es un ser perfecto, no tiene ningún tipo de carencia ni limitación. Esto se refiere a la teología de la creación; la cual define a Dios como el ser omnipotente, el único ser necesario, el origen de todo lo que conocemos.
Es simple, perfecto y único. En su obra “Summa Teológica” parte del principio de las cinco vías para demostrar la existencia de Dios. La primera vía de basa en el movimiento; partiendo de que todo lo que se mueve debe ser movido por algo. Es necesario para el primer paso que eso no sea movido por nada, para que todos entiendan que fue movido por Dios.
La segunda vía es la eficiencia, se refiere a que todo es causado por algo, existe un orden entre las causas que determina su origen. A medida de que se va prolongando, la causa se va disolviendo. Por ello es necesario que exista una primera causa eficiente, que vendría siendo Dios. La tercera vía es la contingencia; se refiere a que existen seres que no son necesarios y otros que sí. Por ende, no todos los seres son posibles y contingentes.
Ahora bien, entre los seres debe haber alguno que sea necesario, de lo contrario ya ninguno existiría. Por lo tanto se considera que esta causa necesaria en la que llamamos Dios. En cuanto a la cuarta vía nos habla de los grados de perfección que hay en los seres; la bondad, la belleza, todo proviene de algo. Existe un ser que permite y nos da la perfección, un ser supremo y perfecto, que vendría siendo Dios.
La quinta y última vía es la finalidad; todo lo que existe en el mundo tiene un fin específico. Por lo tanto debe existir un ser inteligente que guie a todos los seres y los lleve a cumplir su objetivo y su razón en el mundo. Por supuesto quien más que Dios es quien realiza esta gran obra.
Toda esta teoría de Santo Tomás de Aquino es contraria a la Filosofía de San Anselmo, quien parte de la idea de que para comprobar la existencia de Dios debe analizarse su conceptualización. Ambos van aproximadamente con la misma finalidad, demostrar por qué Dios existe y cuál es su rol en el mundo; sin embargo utilizan vías distintas para llegar a sus respectivas conclusiones.
Santo Tomás de Aquino y la Metafísica
En esta ocasión restaura las nociones de Aristóteles en cuanto a la teoría de las cuatro causas, la teoría de la sustancia y la teoría del acto y la potencia. Además acude a las teorías de Platón para hacer una mejor explicación sobre el ser.
La teoría de las cuatro causas creada por el filósofo griego y sustentada por Santo Tomás de Aquino, que es la causa material, que es de lo que está creada una cosa; la causa formal que vendría siendo la cosa como tal; la causa eficiente que es lo que la produce; y por último la causa final, que constituye el objeto para el cual fue creada.
La teoría de la sustancia se refiere al ser como tal, el cual está constituido por materia y forma. Por último la teoría del acto y la potencia, en la cual el acto vendría siendo la sustancia que conocemos, mientras que la potencia es el conjunto de capacidad de la sustancia para llegar a lo que realmente es.
Santo Tomás de Aquino y la pedagogía
Tomás de Aquino consideraba que la educación era necesaria para el ser humano, es su mejor arma en contra de la ignorancia. Fue el quien le dio por primera vez tanta importancia a los estudios; a partir de ese momento ese pensamiento fue muy valorado y continua aún más en nuestros días. No solo el ser humano debe formarse en conocimientos, sino también en moral; la doctrina moral tomista busca sacar las mejores virtudes del ser.
Las personas deben tener una buena educación tanto desde el punto de vista moral como intelectual; ambos se complementan mutuamente consiguiendo así sacar el mayor provecho a los conocimientos y poder vivir en pro del bien común.
Santo Tomás de Aquino y el Derecho
Santo Tomás de Aquino representa una figura muy importante en el ámbito jurídico, su pensamiento es una de las teorías del derecho que se han usado a través del tiempo hasta la actualidad. Todas las universidades al impartir el derecho hacen referencia a Santo Tomás de Aquino y sus aportes. Afirma que la ley debe ir relacionada necesariamente con el bien común y siempre ser justa. El origen del pensamiento jurídico y político se basa principalmente en las ideas tomistas.
Santo Tomás de Aquino y las ciencias políticas
Se basa en las figuras establecidas en las Obras o libros de San Agustín, y la concreta en conjunto con las de Aristóteles. Para Tomás el Estado representa una actitud negativa frente al mundo político. Aristóteles sostenía que algunos hombres han nacido para dominar mientras que otros para servir.
Para Agustín la ciudad de Babilonia estaba llena de corrupción, por lo cual representaba el pecado, mientras que Jerusalén era la ciudad celestial. La sociedad es el estado natural de la vida del hombre, por lo cual el Estado debe procurar el bien común para la sociedad a través de sus leyes.
En su obra La Monarquía Santo Tomás de Aquino muestra el origen de esta corriente ideológica y considera que es el mejor régimen para gobernar. A lo largo de su obra plantea porque el gobierno de una sola persona es mejor que el de varias. Expresa que el rey posee las características para guiar a toda una nación, lo opuesto a la tiranía.
El Rey debe buscar el bien común para la sociedad y no el bien propio. Como lo dice en sus demás obras, los seres humanos deben ser guiados por un dirigente que en este caso sería el monarca. Sin embargo, el rey debe tener ciertas limitaciones para no caer en la tiranía.
Santo Tomás de Aquino y la Economía
Uno de sus pensamientos se basó en la teoría económica. Para Tomás de Aquino todo lo que se encuentra a nuestro alrededor fue creado por Dios, por lo tanto representa un obsequio y debía ser compartido. Sin embargo el hombre necesita realizar ciertas actividades económicas y tener incentivos para salir adelante, uno de ellos es la propiedad privada.
Pensamientos de Santo Tomás de Aquino
Las obras pensamientos y legados de Santo Tomás de Aquino se denomina “tomismo”. Además de las obras que ya fueron mencionadas y explicadas con anterioridad, este santo a lo largo de su vida dio a conocer muchas de sus opiniones principalmente sobre la iglesia y la religión católica.
Relación entre la fe y la razón
Santo Tomás de Aquino siempre busco que se llegara a la conciliación de estas dos figuras. En la Edad Media se decía que la razón estaba subordinada a la fe. En principio la razón viene de los sentidos, mientras que la fe es una revelación divina. Tomás sostiene que hay muchas verdades que sobrepasan la capacidad de la razón humana y que solo pueden ser posibles mediante la fe. Sin duda alguna la fe siempre será superior a la razón.
El Conocimiento
La teoría del conocimiento de Tomás de Aquino también fue establecida antes por Aristóteles. El conocimiento es algo esencial, es una de las cosas que diferencia al ser humano de otros seres vivos. Se trata de elaborar conceptos a través de las imágenes que vienen de los sentidos. El conocimiento es individual de la persona que lo realiza, de otra manera quien no quiera el conocimiento porque se niega a la inmortalidad de su alma.
La Existencia de Dios
Para Santo Tomás de Aquino la existencia de Dios es demostrada a través de las cinco vías que escribió en su obra “Summa Teológica” y que fueron explicadas anteriormente; las cuales van desde la causa hasta el resultado o finalidad de su existencia. Esta teoría fue criticada por muchas personas, por no admitir algunas premisas, lectura imprecisa y errores terminológicos.
Oración a Santo Tomás de Aquino
Se recomienda rezar a Santo Tomás de Aquino e incluir la Oración Padre Nuestro y Ave María. Ya que es mucho más efectivo y rinde honor a la fe que este santo les demostraba cada día.
“Doctor Angélico, tu que viviste para Dios y la iglesia, que dedicaste tu vida a servir a ellos, guíanos para seguir tu camino y encontrar la eternidad de nuestras almas. Agradecemos el legado de sabiduría y conocimiento que nos has dejado y te pedimos que intercedas por nosotros ante Jesucristo, padre tuyo, padre nuestro y padre eterno para permitirnos la gracia de seguir tu ejemplo y alcanzar la vida eterna, por Jesucristo, nuestro señor, Amén”
Oración del Estudiante de Santo Tomás de Aquino
Como ya hemos visto, Santo Tomás de Aquino siempre busco adquirir conocimientos a través de sus estudios, pues pensaba que esta era la mejor manera de vivir, descubriendo todo sobre Dios y la humanidad. Es por ello que tenía una oración que siempre rezaba con mucha fe, para que sus estudios pudieran llenarlo hasta el final de su vida.
“Oh Jesucristo, padre y creador nuestro. Infunde en mí los conocimientos necesarios, ilumíname en el camino del saber con tu luz. Remueve de mí ser la oscuridad y las tinieblas de la ignorancia. Tú qué sabes todo y conoces todo, permíteme a mi conocer esta parte a la que le dedico mi vida. Dame la gracia de saber entender e interpretar la realidad. Y así como yo haz que los demás quieran emprender el camino de los conocimientos que es tan importante, amén”.
Con esta oración Santo Tomás de Aquino busca que el conocimiento siempre reine en él y las personas que lo rodean. Desea que dios le permita cada día aprender un poco más sobre la vida y la eternidad. Esta oración también puede ser complementada con una Oración a san José de Cupertino la cual ayuda a todos aquellos estudiantes que tienen problemas con su educación.
Día de Santo Tomás de Aquino
El 28 de enero de cada año se celebra el día de Santo Tomás de Aquino. Patrono de los estudiantes y de las iglesias católicas. Este día es en el que sus devotos acuden a misa y le ofrecen sus oraciones y gratitud por los milagros cumplidos. Son muchos los feligreses que le rinden devoción al santo conocido como Doctor Angelico, creador de la conocida “Summa Teologica”.
